ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Jesús Gómez Cairo. Foto: Anabel Díaz Mena

Los músicos cubanos, y todo aquel que ame el filón inagotable de los sonidos de la isla, sienten como suya la pérdida de Jesús Gómez Cairo, quien dedicó su vida al estudio, preservación y promoción del arte que quizá define como ningún otro la identidad de la nación.

A los 73 años de edad el prestigioso musicólogo dejó de existir en la capital cubana, a consecuencia de las complicaciones de una insuficiencia respiratoria.

Una de las grandes contribuciones de Gómez Cairo consistió en rastrear el origen y la evolución de La bayamesa, desde su concepción inicial por Perucho Figueredo en 1867 e interpretación pública el 20 de octubre de 1868 en la Bayamo liberada, hasta su asunción como himno de todos los cubanos. 

Dirigió el Museo Nacional de la Música desde 1997, institución a la que consagró talento y sabiduría, entendiéndola no solo como reservorio de la historia musical del país, sino también como una muy activa plataforma promocional y núcleo irradiador de todos los géneros y especies. Más de una vez calificó su desempeño como la mejor manera de saldar deudas con quienes lo precedieron, María Antonieta Henríquez, María Teresa Linares y Odilio Urfé.

Justamente relevó a este último al frente del Centro de Información y Documentación Musical que llevó el nombre del célebre pianista y musicólogo, antiguo Seminario de Música Popular, hasta su integración al Museo. El ordenamiento de la papelería de Urfé fue una de las tareas en las que desplegó sus energías.

A su iniciativa, y a la del siempre recordado Radamés Giro, se debe la colección editorial del Museo, sumamente apreciada dentro y fuera de Cuba. 

Jesús nació en Jagüey Grande, Matanzas, en octubre de 1949, y pudo encauzar su vocación a partir de la fundación de la Escuela Nacional de Arte. Allí, dada su afinidad con las asignaturas teóricas y la historia, y bajo el influjo de las enseñanzas del maestro Argeliers León, optó por la especialización en el Instituto Estatal de Teatro, Música y Cine de Leningrado (San Petersburgo) en la Unión Soviética.

A su regreso a Cuba simultaneó cargos de dirección en el Consejo Nacional de Cultura, el Ministerio de Cultura y el Instituto Cubano de la Música con la investigación y la reflexión musicológica, con resultados de significativa relevancia en el análisis y proyección de la obra de Lecuona, Leo, Benny Moré y el músico que fue Alejo Carpentier. En esa línea fue uno de los responsables de la concepción y puesta en marcha del Programa de Desarrollo para el Rescate, Plasmación y Difusión del Patrimonio Musical de la Nación. 

Nunca se vio a sí mismo como un erudito de gabinete. De ahí que se volcara al aula, al trabajo de campo y a la promoción tanto en Cuba como en otros países de la región. Cuando presidió el Comité del Premio Cubadisco, logró que sus sesiones derivaran en ricos intercambios de percepciones y saberes.

Por su trayectoria mereció el Premio Nacional de la Música y el Premio Nacional de Patrimonio Cultural. También fue acreedor de la medalla Alejo Carpentier. Miembro del Consejo Nacional de la Uneac, luego del IX Congreso de la organización presidió la comisión permanente de trabajo sobre Patrimonio, Ciudad y Cultura. 

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Diego Alberto Serrano dijo:

1

29 de abril de 2023

03:24:18


Un adiós a mi mejor amigo y mentor Jesús Gomez Cairo y mi mas profundo sentimiento de cercanía a su esposa Lida y a Katia ,su hija.

Daniel dijo:

2

29 de abril de 2023

08:26:11


EPD, hermano. Compartimos momentos inolvidables en la adolescencia y ahora comparto el dolor de tu despedida.