Santa Clara.–Intensas jornadas de buena música caracterizaron el 27 festival Longina canta a Corona, concluido este lunes y que, como cada año, reúne en esta ciudad a lo mejor de la tradición trovadoresca cubana, empeñada en no dejar morir la canción de autor.
A la cita acudieron representantes de varios territorios del país, convocados por los muchachos de La Trovuntivitis, proyecto que cumple 25 años de creado y que tiene en el Centro Cultural El Mejunje y en Ramón Silverio, sus principales patrocinadores.
Entre los invitados a la fiesta estuvieron figuras de nuestra música como Augusto Blanca, Juan Campos, el tresero Maykel Elizarde, el Trío Palabras, Yudi Herrera, Ariel Barreiros, Nelson Valdés, Marcos David González, Freddy Laffita, Richard Gómez, y, desde luego, los anfitriones de La Trovuntivitis.
La cita cerró con la peregrinación a la tumba de Manuel Corona, en Caibarién, excelsa figura de la trova cubana a quien se dedica el festival. Fue ocasión propicia para rendir tributo al movimiento de trovadores santaclareños, que recibieron El Zarapico, máxima distinción cultural de la provincia; mientras otros merecieron el sello conmemorativo por los 50 años de la Nueva Trova, entregado por Indira Fajardo, presidenta del Instituto Cubano de la Música.
También fue el momento adecuado para rendir homenaje al cantautor Lázaro García, fallecido el pasado año, importante animador de este tipo de encuentros, tributo que realizó el periodista Joaquín Borges Triana, quien disertó sobre las cualidades del poeta cienfueguero.
Como en ediciones anteriores, el festival llegó a diferentes municipios del territorio, y contó con eventos teóricos y conciertos de destacadas figuras de la trova, entre ellos Polito Ibáñez, Eduardo Sosa, Roly Berrío y Augusto Blanca.
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