Un cronista escribió desde Washington: «Artes de Cuba prueba la potencialidad del arte para hermanar pueblos y restaurar vínculos culturales que no han conseguido romper la hostilidad ni el tiempo». Las evidencias están a la vista: las jornadas iniciales del festival protagonizado por artistas procedentes de la isla antillana en los diversos escenarios del Kennedy Center, de la capital norteamericana, confirman el peso de la creación en el tejido espiritual de nuestra nación.
El fervor del público por cada uno de los actos de la agenda del festival se corresponde con lo enunciado por la vicepresidenta del Kennedy Center, Alicia Adams, al confirmar la realización del evento por encima de los obstáculos interpuestos por la actual administración de la Casa Blanca en su política hacia la Isla: «Estamos decididos a mostrar el arte extraordinario, el talento y los valores humanos del pueblo cubano».

Para este sábado, los seguidores de los eventos musicales del programa, cifran sus expectativas en el concierto de los jóvenes pianistas Aldo López Gavilán y Jorge Luis Pacheco, en el Terrace Theater, calificado con justeza como «un maratón de piano cubano», dada la excelencia mostrada ya por los intérpretes en la gala de inauguración.
También a partir de hoy se exhibirán clásicos del cine. Tres proyecciones ocuparán la pantalla: Memorias del subdesarrollo, de Tomás Gutiérrez Alea; Lucía, de Humberto Solás; y Retrato de Teresa, de Pastor Vega.

La delegación de la Isla está integrada por más de 200 artistas cubanos que han ofrecido un vasto panorama de la música, la danza, el teatro, el cine y las artes visuales que han convertido a Cuba en referente cutural a nivel internacional.










COMENTAR
James Early dijo:
1
13 de mayo de 2018
02:54:20
Responder comentario