El cantante y arpista gallego Roi Casal nunca ha dejado de escuchar lo que le ha dictado el sentido común. Y el sentido común, obviamente, lo ha llevado a observar las raíces folclóricas de Galicia y la riqueza literaria de su país. “Lo incomprensible sería mantenerse ajeno al ecosistema cultural en el que uno vive”, asegura, y pone por delante un ejemplo. “Fíjese en la canción Ninfa das frescas augas, con una estética totalmente pop, que es un himno para mis seguidores. Fue escrita por Rosalía de Castro hace más de un siglo y hoy está sonando en las radios… Es algo mágico, ¿no cree?”, dice a Granma este músico gallego poco después de aterrizar en La Habana para ofrecer dos conciertos el 27 y 28 de mayo en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, donde presentará su más reciente disco Son galego, Son cubano (SgSc) , con letras del español Xosé Neira Vilas y en el que intervienen músicos cubanos como Pablo Milanés, Laritza Bacallao, Jorge Leliebre, César López, Gastón Joya y Osmani Sánchez.
“Aunar en un mismo trabajo a figuras de la talla de Neira Vilas o Pablo Milanés creo que de por sí ya es un valor. Con Neira Vilas he estado trabajando casi dos años en el concepto de este disco, hasta que el verano pasado me envió unas letras para la historia que conforma el cuerpo central de SgSc. Neira era seguramente la persona con mayor conocimiento de la epopeya de los gallegos en Cuba.
“Él vivió más de 30 años en la Isla, y cada día, al salir de su trabajo en el Ministerio de Industria (trabajaba con el Che), se dirigía al Instituto de Literatura y Lingüística para recopilar toda la información relativa a los gallegos en esta isla. Creo que es un hecho histórico excepcional haber contado con la participación de Xosé Neira Vilas en este proyecto, uno de los escritores más grandes que haya dado mi país, sin ninguna duda. Neira falleció en noviembre pasado, y me había dicho en su momento que este trabajo debía ser inaugurado en el Gran Teatro de La Habana, debajo del escudo de Galicia que corona el frontispicio del escenario donde se estrenó por primera vez nuestro himno”, comenta Casal.
Roi Casal (Catoira, 1980) se muestra muy satisfecho por el resultado final de su colaboración con el cantautor Pablo Milanés. “Pablo es uno de los grandes, y lo ha demostrado de nuevo con su participación en este proyecto. La cercanía y sensibilidad demostradas en los días que hemos grabado juntos lo dicen todo de él. Su inconmensurable talento ha hecho que las canciones en las que interviene, Amor cubano y La fortuna de poder amar, sean obras de arte únicas dentro de este disco. Su voz, sumada a su contrapunto femenino del disco como es Laritza Bacallao, que ha grabado dos temas con nosotros, hace que hayamos conseguido un trabajo diverso y rico musicalmente. Estoy seguro de que Son galego, Son cubano servirá para redescubrir nuestra historia común a través de unas canciones vibrantes y llenas de luz”, asegura.
Hijo del célebre gaitero español Nando Casal, Roi integró durante casi diez años el grupo Milladoiro, un referente muy importante de la música tradicional gallega. “Milladoiro es una referencia en Galicia desde hace 40 años. Ellos fueron los pioneros llevando nuestra música tradicional a los grandes teatros y festivales del mundo. Su combinación de tradición y modernidad hizo que la música gallega dejase de ser algo simplemente ‘folclórico’ para convertirse en una referencia respetada dentro de las músicas del mundo”.
Roi Casal llegó a la banda con apenas 19 años para sustituir al legendario arpista Rodrigo Romaní.“Entré a Milladoiro cuando estaba a punto de celebrar sus 25 años de existencia, ya consagrada como la mejor banda gallega de todos los tiempos. Con ellos aprendí a tener un respeto y un compromiso inexorable con el legado recibido gracias a generaciones de músicos anónimos que han mantenido viva nuestra idiosincrasia musical. Siempre les agradeceré que me hubiesen dado la oportunidad de formar parte del grupo y su historia”.
En el 2009 decidió abandonar las filas del grupo para emprender su carrera en solitario, en la que ha grabado con anterioridad los álbumes Lendas douradas, Maxicamente Vello y Donos no noso destino. “Fue una decisión personal y reflexionada. Poca gente entendía por aquel entonces como podía tomar la decisión de abandonar la seguridad de subir a los escenarios con los más grandes para aventurarme en un viaje incierto. Pero yo no podía traicionarme a mí mismo. Honestamente, siempre creí que tenía algo que ofrecer al público, y ese camino debía andarlo por mí mismo. Los inicios en solitario fueron un reto difícil, pero no hubo ningún momento en el que me haya arrepentido de haber tomado aquella decisión. Era lo que debía hacer, simplemente. Esa decisión me ha llevado a escenarios de medio mundo, a tener un público fiel y, sobre todo, a lograr la paz interior que te confiere disfrutar de los réditos de tu propio esfuerzo y trabajo”, reflexiona.
Son galego, Son cubano nace en el viaje que Roi realizó hace dos años a La Habana donde recibió el premio Internacional Cubadisco. “En el 2014 — recuerda — realizamos una gira por distintos países de Latinoamérica, y en Cuba tuve el honor de recibir el Premio Internacional Cubadisco ese año. Cary Diez, del Instituto Cubano de la Música, me propone realizar un trabajo que ponga en valor la impresionante historia en común entre Galicia y Cuba. De hecho ahí fue cuando adquirí ese compromiso y desde entonces hemos ido sumando talentos al proyecto de tal modo que Son galego, Son cubano ha adquirido una gran dimensión y un nivel de calidad excepcionales”.
“Desde el 2009 —agrega— he editado tres discos, y cada uno de ellos fue el álbum más vendido en Galicia en el año de su lanzamiento. Aunque se puede percibir una progresión, en los tres trabajos hay una línea estética similar, con la que el gran público me identifica. Son galego, Son cubano es un punto de inflexión en mi carrera, dado que se trata de un disco temático sobre Galicia y Cuba, que escapa de mi estética anterior y ahonda decididamente en las sonoridades e instrumentación de ambos países. Por supuesto, este reto sería impensable asumirlo sin un punto de vista cubano, y por eso hemos contado en el proceso de creación con la dirección artística de Cary Diez, con los arreglos musicales de Miguel Núñez y con un grupo de músicos (Jorge Leliebre, César López, Gastón Joya, Osmani Sánchez, Elio Rodríguez, César Echevarría, El Indio, etc…) que han dado un carácter muy particular a unas canciones compuestas al otro lado del Atlántico hasta lograr un bello equilibrio”.












COMENTAR
Responder comentario