La recuperación de polos productivos y el incremento de áreas en desarrollo para ponerlas a producir, constituye hoy una prioridad en el territorio tunero.
A partir de la implementación de la Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional, se ha fortalecido el compromiso de todos los organismos y factores que, de una forma u otra, intervienen en esta tarea imprescindible. No obstante, hay elementos en los que falta mucho por hacer.
Específicamente el sector de la agricultura debe atender en la provincia, por su objeto social, a más de 470 000 habitantes, lo que implica una producción anual de alrededor de 766 000 toneladas. Eso quiere decir que tiene que sembrar unas 890 hectáreas mensuales.
En materia de cultivos varios, la provincia cuenta con 34 425 ha. No obstante, con la tierra no basta, por ese motivo, se trabaja bajo el principio de optimizar al máximo los recursos existentes y lograr una estrecha vinculación con los productores.
Aunque el territorio ha estado cumpliendo con los planes previstos para las campañas, persisten debilidades en la comercialización, que tienen que superarse para que lo que se produce llegue a su verdadero destino: la alimentación familiar.
Los llamados polos productivos abarcan los ocho municipios, con un área total de 12 980 hectáreas, de las cuales unas 1 600 son estatales, 2 800 de ellas bajo riego. Por su impacto en la alimentación, la mayor cantidad de tierra se destina al plátano, la yuca, el boniato, las hortalizas y los granos.
Todavía persisten en el territorio debilidades como falta de intercambio directo con los productores, poca aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación, así como desvío de producciones a canales informales, lo que incrementa los precios y dificulta la accesibilidad a las producciones agrícolas.
Si bien en los últimos meses se ha estabilizado la presencia de productos del agro, sobre todo en ferias semanales, se necesita estabilizar la comercialización durante todos los días de la semana.
Urge disminuir los trámites burocráticos para la entrega de tierras a organismos que desean fomentar autoconsumos, así como revitalizar las fincas de uso colectivo y otros espacios en los que se pueda fomentar la producción a pequeña y a mediana escala.
En el más reciente pleno del Comité Provincial del Partido, su primer secretario, Walter Simón Noris, llamó a sacudirse el inmovilismo, a promover un cambio inmediato de mentalidad y a pensar siempre en el pueblo, como motivación esencial del trabajo diario.
Otras prioridades se dirigen a fortalecer el programa arrocero, a lograr el autoabastecimiento de frijol de la canasta familiar normada en varias localidades y a elevar el control permanente sobre la tierra.


 
                        
                        
                        
                    





 
     
    










COMENTAR
Eduardo dijo:
1
29 de agosto de 2024
16:03:53
Responder comentario