Ante la propagación de la COVID-19 en Cuba, una de las medidas adoptadas por los gobiernos territoriales fue la separación de los servicios que ofrecían las terminales de ómnibus interprovinciales: los pasajeros con reservación para viajar tomarían la guagua en una terminal y los que se anotaban en la lista de espera, lo harían en otra.
Esta medida se establecía para que no se acumulara gran cantidad de personas en un mismo establecimiento. Las direcciones provinciales de Transporte asumieron la lógica de dividir sus servicios en dos centros, los cuales en algunas provincias se encontraban relativamente cerca, pero en otras estaban alejados.
Como es de conocimiento público, la COVID-19 ha disminuido su impacto en Cuba por el logro de nuestras vacunas y de la estrategia de inmunización; sin embargo, la medida descrita se mantiene en la mayoría de los territorios del país.
En Sancti Spíritus era un reclamo del pueblo que el servicio de lista de espera regresara a la «terminal nueva» –como se conoce en la ciudad a la terminal de ómnibus nacionales–; una edificación terminada en los últimos años que cuenta con un confort adecuado, mayor limpieza, climatización en algunas áreas y está ubicada en una zona céntrica, no así la llamada «terminal vieja» (intermunicipal).
«Las personas se quejaban de la falta de alimentos y de higiene –comenta a Granma la espirituana María Orizondo, para referirse a la terminal intermunicipal–, además, es un lugar muy oscuro, al que a veces había que ir en la noche para acceder a la lista de espera».
Tras un reportaje del semanario Escambray titulado ¿Terminal o museo? se intensificó el debate popular y las autoridades de transporte en Sancti Spíritus anunciaron el retorno del servicio de lista de espera hacia la nueva terminal.
UN REGRESO DE POCOS TROPIEZOS
Un comunicado de la Dirección Provincial de Transporte en Sancti Spíritus anunciaba que a la medianoche del día 17 de enero se trasladarían todos los clientes anotados en la lista de espera hacia la terminal interprovincial.
«El restablecimiento de la lista de espera acá en la terminal nueva fue un poco demorado –explica José Lorenzo García, director de la Dirección Provincial del Transporte–. En diciembre del año pasado explicamos que había que crear un grupo de condiciones logísticas, por ejemplo, Viajeros trabaja con un sistema informático que demoró reestablecer en la terminal nueva alrededor de 15 días.
«Existen dos entidades: la encargada del patrimonio es Ómnibus Nacionales, y quien hace las operaciones comerciales con los pasajeros es Viajeros. Son dos empresas que se vinculan para ofrecer el servicio de transportación al resto del país», detalló Lorenzo García.
Esa primera madrugada, los servicios funcionaron con total normalidad. Jorge Luis Rodríguez Brito, director de Ómnibus Nacionales en Sancti Spíritus, comentó que les explicaron a los clientes «cómo debe ser el comportamiento en esta terminal: no fumar en el salón, no dormir ni ubicar el equipaje en los asientos y otras cuestiones, porque ya se instalará el servicio aquí definitivamente, previa coordinación de las empresas Viajeros y Ómnibus Nacionales con las autoridades del Gobierno».
Ahora, según añade Lorenzo García, aunque el servicio de lista de espera pasa a la terminal interprovincial, la reservación directa para viajar a otra provincia, que siempre se realiza varios días previos al del viaje, se mantendrá en la terminal intermunicipal; algo que resulta contradictorio si la intención es, como comentan los directivos, concentrar los servicios.
Cabe señalar que la terminal nueva nunca estuvo cerrada completamente: servía para que los pasajeros con boletos rectificaran y abordaran el ómnibus; pero al no ofrecer la lista de espera, que es el servicio que más personas demanda a última hora, por un tiempo prolongado en ocasiones, otros servicios como la cafetería, el salón de reservaciones, los baños interiores o el cuarto del lactante estaban prácticamente en desuso.
Según Roberto García Ramírez, administrador de la terminal de ómnibus nacionales de Sancti Spíritus, los clientes ahora notan el cambio: «Me dicen que no es lo mismo estar en aquella terminal a estar en esta con más confort… Siempre aseguraba que no era una preocupación para nosotros acoger el servicio de lista de espera porque por aquí pasan muchas guaguas y no se llena el salón completamente».
Los choferes del viaje Cienfuegos-Holguín comentaron, a su paso por la terminal nueva de Sancti Spíritus, que es más fácil para ellos, que antes tenían que llegar a una terminal y después ir a la otra. Ahora es una única terminal para abordar los ómnibus interprovinciales.
En la terminal hay varios baños: dos dentro y dos en la zona de los andenes, para los pasajeros que hacen escala, además de dos baños unipersonales para personas con alguna discapacidad (uno para cada género).
Existen también servicios de tiendas, de Etecsa y Correos de Cuba, a los cuales acceden no solo pasajeros, sino cualquier ciudadano que esté en la ciudad espirituana. Además, se dispone de un salón de espera para las reservaciones, otro para la lista de espera y de un tercero para los turistas extranjeros que se transportan por otras agencias de viaje, que también expiden sus boletos en esta terminal, lo cual aporta liquidez en divisa.
Cuenta también esta entidad con un pequeño teatro, oficinas administrativas; un cuarto para el lactante con sillones, cama y corral para bebés, habilitado para que las madres puedan acceder, junto a sus hijos, a un lugar más privado; y una cafetería estatal con variedad de ofertas.
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Milagros dijo:
1
23 de marzo de 2023
07:14:58
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