Si se comparan las tasas brutas de accesos a la educación superior del año 2000 con las de 2019, se comprueba que se ha conseguido duplicar la tasa de acceso, señaló en el Congreso Universidad 2022 Frances Pedró, director del Instituto Internacional de la Unesco para la Educación Superior en América Latina y el Caribe, quien agregó que ante ese contexto un reto importante es que el acceso sea de manera inclusiva y garantizando la igualdad de oportunidades.
El aumento de la participación no se ha hecho de una manera equitativa, sino que ha favorecido, fundamentalmente, a quienes ya estaban más representados en la educación superior, asegura.
En el Foro «Concertación y seguimiento de la III Conferencia Regional de Educación Superior, CRES 2018» el experto subrayó que persisten graves desigualdades en la región en términos de acceso en función de la ubicación del estudiante, es decir, si se encuentra en zonas rurales o zonas urbanas.
Añadió además que, en función de su extracción socio-económica, hay siete veces más probabilidades de asistir a la educación superior si se tiene la suerte de pertenecer a un extracto socio-económico elevado, en comparación con los que vienen de un extracto más vulnerable. En países de América Central esta proporción puede elevarse a 12 veces más, e incluso, hasta 18 veces más.
De acuerdo con Pedró, el acceso es una variante de tres formas de inequidades que existen en la región. En este sentido se refiere a las inequidades que se producen antes del acceso a la educación superior.
«No solo hay inequidades en el acceso, hay inequidades que arrancan previamente y hay, además, inequidades en la graduación», asegura.
Ante estas realidades que viven naciones de América Latina y el Caribe, «las respuestas en términos políticos para conseguir mejorar las tasas de participación de una forma que favorezcan la igualdad de oportunidades han sido muy diversas en nuestra región, desde la creación de nuevos lugares de estudio hasta su diversificación. Son muchos los países que han introducido nuevas fórmulas como institutos politécnicos que ofrecen, igualmente, acceso a la educación superior».
En América Latina las tasas de graduación en el nivel superior son equivalentes al 46 %, en otras palabras, menos de la mitad de los estudiantes que ingresa consigue graduarse, subrayó el Director del Instituto Internacional de la Unesco para la Educación Superior en América Latina y el Caribe.
Entre las respuestas que se han dado —refiere Frances Pedró— es muy importante la recuperación del estado en la dirección de las políticas de educación superior en un contexto en que la autonomía universitaria debe seguir siendo una garantía.
COMENTAR
Responder comentario