Ciego de Ávila.–En la adecuada formación de quienes permanecen frente a las aulas y la capacitación de los futuros maestros radica unas de las principales fortalezas del sector de la educación en esta provincia, en medio de las interrupciones causadas por la COVID-19, pandemia que afecta a todo el país.
La doctora Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación, dijo en un encuentro con educadores de la provincia que también constituyen prioridades la formación vocacional y la orientación profesional en función de la continuidad de estudios y el adiestramiento de la fuerza de trabajo calificada de nivel medio superior que demanda el territorio, en estrecho vínculo con los organismos y empresas de la provincia.
Con buenos ojos vio la titular que el territorio avileño disminuya el éxodo de docentes de 198 (en el 2019) a 67 y que la cobertura docente en las distintas enseñanzas –eslabón débil durante años– esté garantizada en más del 97 por ciento, con mayor estabilidad en los municipios de Chambas, Bolivia, Primero de Enero y Ciro Redondo.
Insistió en la necesidad de mantener en los centros alta la retención a los estudiantes que ingresan a las escuelas pedagógicas hasta hacer efectiva su graduación, algo en lo que Ciego de Ávila avanza lentamente, sobre todo en la Rafael Morales, del municipio de Morón, donde no se logran las cifras esperadas en ese aspecto.
Además de tener un claustro bien preparado, «la garantía del proceso docente-educativo está en la formación de profesionales en las universidades y las escuelas pedagógicas y, a la vez, lograr que quienes egresen continúen su formación, a partir de que quien no sea licenciado no puede acceder a los cursos de postgrado, maestrías y doctorados» escalones que pueden alcanzar quienes se lo propongan, comentó.
COMENTAR
Responder comentario