ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

¿Cuba ha tenido una sola Revolución, o varias sucesivas? ¿Concluyó nuestra Revolución? ¿Son eternas las Revoluciones?

Sobre estas interrogantes reflexionaron docentes, académicos e investigadores del sistema de escuelas del Partido, como parte de la primera jornada del evento científico nacional sobre dirección política de la sociedad a 150 años del inicio de la Revolución cubana, que comenzó este jueves en la capital y concluirá el viernes.

La Revolución cubana es una, la misma que inició Céspedes, y que ha perdurado hasta nuestros días, aseguró René González Barrios, presidente del Instituto de Historia de Cuba, en el marco del evento.

Un grupo no despreciable de académicos cubanos y extranjeros aseguran que este proceso ya concluyó, y lo que vive la Cuba de hoy es algo más, explicó González en las palabras centrales del encuentro nacional, que tiene lugar en la Escuela Superior del Partido Comunista de Cuba Ñico López.

«Sin embargo, el creer que la Revolución cubana acabó, es una tendencia a todas luces peligrosa, cuyo único objetivo es desmovilizar a nuestro pueblo, haciéndonos ver la necesidad de que el proceso que estamos llevando adelante no es necesario», reconoció.

Hoy continúan vigentes las cuatro premisas que guiaron a Carlos Manuel de Céspedes al comenzar la Revolución el Diez de Octubre de 1868 en La Demajagua, en el Oriente del país, y las mismas que han prevalecido a lo largo de estos 150 años de historia: la independencia de Cuba al precio que sea necesario, la defensa de la justicia social, la solidaridad con otros pueblos y el antiimperialismo, valoró el especialista.

La historia ha demostrado que las Revoluciones no son eternas. Han tenido periodos de vigencia, sin embargo, languidecen por los errores que se han cometido, cuando han faltado la unidad, el espíritu de lucha, o se ha mellado la comunicación entre quienes la dirigen y las grandes masas, reflexionó.

«Cuando han existido todos esos problemas, las revoluciones se han perdido y convertido en un espíritu contrario al que sus fundadores establecieron; como ocurrió con el Campo Socialista, por ejemplo», mencionó.

En el caso de Cuba, «debemos reflexionar sobre ello para que la historia no se repita, es la mejor forma de honrar las ideas, el recuerdo del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, el primero en reflexionar que nuestra Revolución es una, continua y ascendente», explicó González.

Mantengamos la victoria y el espíritu de Revolución eternamente, resaltó, porque de lo contrario perderíamos todo: nuestros valores, identidad, compromisos. Implicaría desarmar el proyecto de nación que hemos elegido construir durante casi 60 años.

«Soy de los convencidos de que la Revolución cubana permanece, es fuerte y seguirá siéndolo mientras todo nuestro pueblo la haga suya», concluyó.

Rosario Pentón Díaz, rectora de la Escuela Ñico López, añadió en conversación con la prensa, que con toda la modestia que nos caracteriza, debemos mirarnos por dentro y reflexionar sobre lo que nos toca hacer para mantener el objetivo supremo que tenemos como país: defender la obra cotidiana, expresó.

Sobre este nuevo encuentro nacional, realizado de forma bianual y considerado el principal evento teórico del sistema de escuelas del Partido en la Isla, la rectora explicó que, «en esta ocasión, convocamos para debatir el papel que jugamos como escuela en la preparación de los cuadros, y su contribución a los saberes de todas las ciencias.

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michael vazquez dijo:

1

30 de noviembre de 2018

02:43:57


Todo el pueblo continuara haciendo suya la revolucion mientras esta y sus dirigentes representen sus intereses.

Miguel Angel dijo:

2

30 de noviembre de 2018

11:33:54


Muy interesante el evento, trascendental la temática, de absoluta vigencia. Es como el ser o no ser. Algunos pueden pensar que se trata de una insana obsesión por mantener viva la ideología, como algo abstracto e inmaterial, pero está ahí, es la esencia que nos vigoriza y perpetúa a través de la historia. Ingenuamente o de manera mal intencionada nos convidan a la amnesia, para que descuidemos los bastiones patrióticos e ideológicos que nos mantienen firmes, fortalecidos e indestructibles. La historia demuestra con creces que aquellos que no han defendido la génesis de las revoluciones han cavado su propia sepultura, ejemplos sobran. Se trata de etapas de un mismo proceso revolucionario, de una misma Revolución, de Yara hasta nuestros días, si cejamos en el glorioso empeño la asesinamos. Habría sido en vano los más de 150 años de gloria vivida, el heroísmo y sacrificios derrochados, la sangre derramada. No podemos permitir tal conjura con ropaje de "ingenuidad", para convertirlo en un alevoso acto de traición. Plenamente de acuerdo con lo brillantemente expresado por el destacado historiador e investigador René González Barrios, presidente del Instituto de Historia de Cuba: «Soy de los convencidos de que la Revolución cubana permanece, es fuerte y seguirá siéndolo mientras todo nuestro pueblo la haga suya». Mantengamos incólume el legado de Fidel.

Miguel Angel dijo:

3

1 de diciembre de 2018

08:26:40


Muy interesante el evento, trascendental la temática, de absoluta vigencia. Es como el ser o no ser. Algunos pueden pensar que se trata de una insana obsesión por mantener viva la ideología, como algo abstracto e inmaterial, pero está ahí, es la esencia que nos vigoriza y perpetúa a través de la historia. Ingenuamente o de manera mal intencionada nos convidan a la amnesia, para que descuidemos los bastiones patrióticos e ideológicos que nos mantienen firmes, fortalecidos e indestructibles. La historia demuestra con creces que aquellos que no han defendido la génesis de las revoluciones han cavado su propia sepultura, ejemplos sobran. Se trata de etapas de un mismo proceso revolucionario, de una misma Revolución, de Yara hasta nuestros días, si cejamos en el glorioso empeño la asesinamos. Habría sido en vano los más de 150 años de gloria vivida, el heroísmo y sacrificios derrochados, la sangre derramada. No podemos permitir tal conjura con ropaje de "ingenuidad", para convertirlo en un alevoso acto de traición. Plenamente de acuerdo con lo brillantemente expresado por el destacado historiador e investigador René González Barrios, presidente del Instituto de Historia de Cuba: «Soy de los convencidos de que la Revolución cubana permanece, es fuerte y seguirá siéndolo mientras todo nuestro pueblo la haga suya». Mantengamos incólume el legado de Fidel.