Duele visitar Cojímar. Luego del desastre, atravesar la calle 21 cerca de la costa es condenarse a esa suerte de entusiasmo que intenta esconder el desgarramiento, y no lo logra. Nadie llora. Un niño se las arregla como puede con su pala ante el montículo de escombros. Una familia entera mira la desgracia desde lo que fue una cocina, y yo me siento increíblemente inútil con la grabadora atrapando historias, haciéndoles recordar.
Florismel Guerra Páez es una de las vecinas a las que Irma le arrebató su hogar. «Nosotros nos fuimos temprano a casa de unos familiares y dejamos todo porque pensamos que esto no iba a ser tan grande. Solo nos llevamos unas ropas, pero lo perdimos todo, lo perdimos todo. El frío lo sacamos ahora y no sabemos si enciende. Regresamos por la mañana y vimos esto. El impacto fue grandísimo. Lo perdimos todo, pero nos salvamos nosotros: la vida es lo principal», y esto último lo dice con los hombros tensos, como si fuera una frase obligada.

Foto a foto el lugar empeora en derrumbes y basura. Un compañero del Partido, que apoya las labores de recuperación, nos presenta a Francisco García, entrenador del equipo nacional de Karate-do, y damnificado del huracán. El hombre sonríe.
«La mitad de mi vivienda se cayó, pero aquí estoy guerreando. Yo me evacué temprano, como a las seis de la mañana y el jefe Froilán me dijo: se van a ver cosas nunca antes vistas aquí, me hace falta que me ayudes a sacar a la gente. Las personas fueron bastante receptivas. Yo hice una mochila con lo más imperioso, sacamos algunos equipos, pero realmente nunca pensamos que esto iba a tener la magnitud que tuvo. Yo me dije, si el ciclón me lleva las cosas es porque me acabó con la casa, y eso fue precisamente lo que sucedió: tumbó la casa».
Es un tipo de postura impecable, el sensei, y hace jaranas mientras habla, como si esquivara con ellas los golpes del suceso.
«Pero aquí estamos, luchando, samurái. Muchos de los que vivimos aquí nos aferramos a este pedazo, porque el que vive al lado del mar conoce sus “bondades”, pero este parece ser el último regaño. Ahora queda confiar en el gobierno y el Partido y en esta Revolución. Por el momento estoy en la casa de unas amistades. Y te digo algo simpático, nos autoevacuamos y casi tenemos que irnos de allí también, que es como tres cuadras pa´arriba. El mar llegó hasta allá y tumbó la cerca, pero no afectó la casa», asegura.
Lo seguimos por un pasillo bien angosto que da al patio. «El mar está en mi patio», bromea. Al fondo del zaguán, el equipo se las arregla con los remanentes de la vivienda destruida, sacando arena y rescatando algunas pertenencias.
«Supimos lo del profesor y nos pusimos de acuerdo con los muchachos para venir a ayudarlo. Aquí hemos recogido escombros, basura, hemos ayudado a recuperar todo lo que se pueda. El equipo entero está aquí, hembras y varones. De ninguna manera podíamos permitir que el sensei atravesara por esto solo. Él es quien conforma nuestro equipo» comentó Deinys Muñoz, capitán del equipo nacional de Karate-do.
Edgar Martínez Ramírez, otro de los atletas de la selección, interrumpe su labor para hablar con nuestro diario: «Ahora estamos tratando de tumbar la placa de la parte de atrás de la cocina, que está floja y puede caerse en cualquier momento –dice con la voz entrecortada por la fatiga– nos enteramos por el director de la escuela y enseguida bajamos hasta acá para ayudarlo. Ayer botamos escombros y hoy estamos limpiando lo que quedó de la casa».

En la calle, organizando el trabajo y alentando a los vecinos, se encuentra Nelcy Guzmán, presidenta del consejo popular.
«El pueblo de Cojímar vio por primera vez la penetración del agua de una manera extremadamente fuerte. Aquí nadie había visto cosa semejante. En un principio estaba todo el grupo de evacuación, e hicimos un trabajo previo. Algunos hicieron resistencia pero al final colaboraron. En este minuto se encuentra la población y la empresa constructora ayudando a limpiar todo esto. Hubo pérdidas de casas, pero lo importante es que se ve la cooperación por parte de los vecinos. El cojimero tiene gran sentido de pertenencia, y se han dañado muchos hogares. Hay dolor», comentó.
A través de Froilán Rodríguez Barbán, jefe del trabajo político ideológico en La Habana del Este, conocimos que en el municipio se evacuaron 9 221 personas, en su gran mayoría albergados por amigos y familiares residentes en zonas altas del territorio.
«En Cojímar hay 30 postes de telefonía en el piso. Etecsa ha habilitado grúas y ya contamos con un puesto de mando para estos asuntos. Nosotros habilitamos dos centros de evacuación en ambos consejos populares, y ahora estamos en coordinación con los técnicos de vivienda para garantizar albergue a aquellas personas que se quedaron sin nada», puntualizó.
El funcionario alegó también que existe toda una estrategia de recuperación en los consejos populares afectados. «Un pelotón está actuando ahora mismo en Guanabo con seis camiones y un cargador frontal; en Cojímar tenemos diez camiones y un cargador. En ambos casos contamos con el apoyo de la ECOI 53. También tenemos ocho brigadas trabajando en el tema de la electricidad.
Casi al marcharnos, el profesor García nos interceptó.
«Mira, periodista, esto no lo puedo dejar de decir. Porque después de todo lo que pasó aquí, con lo único que se me aguaron los ojos es con lo siguiente –hablaba como quien se resiste a llorar–. Le dije a los muchachos que ahora sí podrían librarse de mí porque yo iba a pedir un año de licencia para ponerme a trabajar en la casa, y ellos me dijeron: qué va, profe, usted no nos puede abandonar porque nosotros tenemos que ser campeones en los Juegos Centroamericanos.
Usted va a los entrenamientos, y cuando terminemos nosotros venimos a trabajar con usted aquí. Esa fue la respuesta de esos muchachos, samurái. Todavía lo digo y me emociono. ¡Esa es mi tropa!».
Nos fuimos alejando y el desastre se hacía menor en perspectiva. Un vecino del lugar nos dio el único dato que faltaba en la agenda para ponerle coordenadas al infortunio. ¿Y cuál es la dirección de esto aquí? –indagué–. «Lindero y Final, mijo», fue su respuesta.



















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perez perez dijo:
1
12 de septiembre de 2017
08:50:45
Rafael Rodriguez dijo:
2
12 de septiembre de 2017
13:11:32
Yolanda Fallas dijo:
3
12 de septiembre de 2017
15:15:08
Leticia Cepeda Quevedo dijo:
4
12 de septiembre de 2017
17:07:59
Jennys Alba guilarte dijo:
5
13 de septiembre de 2017
13:11:13
Berto Falcon Hidalgo dijo:
6
14 de septiembre de 2017
22:19:15
El ninja dijo:
7
20 de enero de 2018
22:06:44
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