ISLA DE LA JUVENTUD.—La transportación marítima de pasajeros constituye el principal puente de enlace entre el Municipio Especial y la isla grande de nuestro archipiélago, también está la vía área, pero las embarcaciones cuentan con mayor capacidad.
Sin embargo, ello no justifica que se viaje con exceso de peso en el equipaje, a eso nos hemos malacostumbrado; algunos como un reflejo natural de la vida por la poca rigurosidad que en los últimos años ha exhibido ese sistema, mientras otros se aprovechan justamente de esa fisura para hacer de las suyas.
Con tales actitudes, no se percibe que la sobrecarga incide de manera directa en el deterioro técnico de los navíos al incrementar el funcionamiento de las máquinas principales y afectar su estabilidad.
Se adicionan a los más de diez años de explotación, las alternativas puestas en función de mantener el confort, en específico en la embarcación Río Júcaro, con el emplazamiento de un grupo electrógeno en la cubierta superior para mantener las tres consolas instaladas con el doble de peso de las concebidas en el diseño original, en aras de solucionar las vicisitudes de la climatización central.
Otra afectación del sobrepeso, es en la seguridad a bordo, pues dificulta la salida en situaciones de emergencias. En caso de ocurrir un incendio, por ejemplo, obstruiría la evacuación del personal.
Los mencionados inconvenientes van en contra de asegurar un servicio continuo a la población, pues de conjunto con el desgaste técnico de los catamaranes está la imposibilidad del país de adquirir nuevos barcos; por ello es fundamental que las personas concienticen la necesidad de viajar con el peso establecido.
Según precisó al periódico Victoria, Armando Nieves Mestre, director de la Empresa Municipal Viajero, desde el día primero del mes en curso está en vigor la regulación que plantea que cada viajero tiene derecho de llevar hasta 20 kilogramos (kg) en su equipaje y solo 10 kg permitidos de sobrepeso, el cual deberá pagar.
El directivo explicó que esta disposición no es nueva, la cuestión está en que con anterioridad los individuos se excedían incluso por encima de 30 kg, pagaban lo requerido para la cuantía que fuese y resuelto el problema.
Esta norma inició para el trayecto Nueva Gerona–Batabanó, mientras a la inversa aún permanece deshabilitado hasta noviembre, establecido así por el Ministerio de Transporte en busca de soluciones, pues de acuerdo con estudios realizados es precisamente en la travesía Batabanó–Nueva Gerona en la cual es mayor el fenómeno del exceso de peso. De igual manera se estudia el caso de quienes vienen desde el exterior, en pos de hallar variantes objetivas.
Por el momento nos toca encontrar soluciones personales para transportar lo deseado sin superar lo establecido, como mismo ocurre en el aeropuerto a la hora de abordar el avión donde sabemos justo lo que debe llevarse y no se permiten indisciplinas de este tipo.
De lo contrario los catamaranes, tan pineros como los ríos cuyos nombres ostentan, afrontarán daños severos por la explotación en demasía y al final los locales seremos los más perjudicados, quienes a diario nos beneficiamos con ese servicio de forma constante y segura.
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Fabio dijo:
1
19 de agosto de 2015
08:42:37
carlos ramirez dijo:
2
19 de agosto de 2015
10:09:13
yam dijo:
3
19 de agosto de 2015
10:42:04
Javier dijo:
4
19 de agosto de 2015
13:08:34
Guillermo dijo:
5
19 de agosto de 2015
17:51:24
Franky dijo:
6
20 de agosto de 2015
01:00:53
mary dijo:
7
21 de agosto de 2015
16:18:04
Julio César Carralero dijo:
8
10 de mayo de 2022
10:18:06
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