ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Christhian Menéndez cambió el frontón por la gloria en el raquetbol Foto: Cortesía del entrevistado

¿Cuántos lo habrían intentado antes, sin alcanzarlo? Christhian Menéndez Abierno apareció, el dios del raquetbol le extendió su raqueta y su mano, e inscribió su nombre como el primer campeón mundial juvenil de Cuba en ese deporte, el 13 de diciembre de 2024, en Guatemala.

Exactamente un año después obligó a los astros a alinearse de nuevo para retener su título en otro país del área, en República Dominicana. Ambas veces doblegó por el título al surcoreano Taein Woo, primero 3-1 (11-7, 11-9, 4-11 y 10-9), y luego lo barrió con parciales de 11-7 y un doble 11-8.

¿Qué sucesión de hechos llevó al joven habanero a encontrarse un día de pie sobre su camino?

«Yo jugaba frontón a 20 metros y en un campeonato nacional en Mayabeque, donde obtuve la medalla de oro, me llamaron del raquetbol y me citaron para probar cómo me desenvolvía. Estuvo todo bien, me gustó y comencé a entrenar en el Fajardo, con Jorge Núñez y Raúl Martínez».

Todo ocurrió muy rápido. «Me sorprendió la victoria en mi primer mundial, aunque iba por un buen papel y siempre dije que llegaría a la final. Así fue, y obtuve mi corona, lo mejor que me pudo haber pasado. Todo resultó muy bonito, al ser primer monarca de la Isla; nunca había pasado antes y me sentí satisfecho».

Para la segunda edición optó por la modestia de no creerse el gran favorito, «pero sí me veía entre ellos, me lo propuse y lo volví a lograr. Mejoré en todos los aspectos de un evento al otro, entrenando fuerte todos los días y con la disciplina necesaria. El surcoreano con el cual he sostenido las dos disputas de la máxima presea constituye mi principal rival.

«Mi familia y mis amigos están muy alegres, así como mis profesores y mi comisionado, porque ya soy bicampeón del orbe. Todos me han apoyado siempre y les brindo las gracias por ese respaldo».

Sin regodearse en sus lauros conquistados, espera continuar una fuerte preparación para mantener e incrementar su nivel cuando ascienda hacia la categoría de mayores, en búsqueda de resultados igual de sobresalientes.

«En mi juego hay que ser muy rápido, tener buena agilidad, resistencia y estar activo siempre, con mucha adrenalina», confiesa el zurdo Christhian sobre las claves para triunfar en su deporte, en el cual ya grabó su nombre y trabajará por volver esa huella imperecedera.

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