
Cuando el universo deportivo cubano, y en particular el del atletismo, celebraba los 8,24 centímetros en el regreso del subcampeón olímpico de Tokio-2020, Juan Miguel Echevarría; y también el retorno sobre la barrera de ocho, de Maikel Massó, bronce en la misma justa bajo los cinco aros, a Cuba le nació otra estrella en el tanque de saltos. Jorge Odelín, un espirituano de Cabaiguán, del barrio de Las Cuatro Esquinas, voló en Camagüey, en el Campeonato Nacional Juvenil.
A sus 18 años se estiró hasta los ocho metros y 34 centímetros, para imponer una nueva cota cubana en la categoría, superando los 8,33 del propio Massó, que databa del 14 de julio de 2017.
En la lid agramontina, el espigado moreno dejó en su secuencia de intentos registros de 8,15 y 8,20, con lo cual superaba sus 8,04, que lo mantenían como tercer hombre entre los menores de 20 años en este 2025, superado, entonces, por el sudafricano Temoso Masikane (8,06) y el francés Remi Mourie (8,05).
Este es su bautizo en la corte del atletismo y en el salón de lujo del salto de longitud, y lo hace como lo hizo el legendario Carl Lewis. El estadounidense, llamado El hijo del viento, logró una medición similar, 8,35, el 6 de junio de 1980, cuando tenía la misma edad que Odelín.
Sobre el de Cabaiguán se posarán ahora todos los reflectores, y las primeras luces que lo enfocarán serán las de los Juegos Panamericanos Juniors, en Paraguay, pues cualquiera de los tres saltos por encima de ocho metros que logró en Camagüey, hasta hoy han sido inalcanzables para saltamontes de menos de 20 abriles en todo el mundo.
De acuerdo con un reporte del periódico espirituano Escambray, que citaba a la acn, Odelín tiene como referencia e ídolo a Iván Pedroso. Sin duda, el campeón olímpico de Sydney-2000 ha de sentirse orgulloso de este ascenso, porque viene a confirmar la calidad de la escuela cubana de la longitud, encabeza por él, Echevarría, Massó, Jaime Jefferson, Luis Bueno, David Giralt, entre otros grandes.
LEYENDO EL VUELO DE 8,34, DE ODELÍN
Maike Powell, recordista mundial desde 1991, con 8,95, logró con 25 años la marca que acaba de hacer Odelín .
El actual campeón olímpico, el griego Miltiadis Tentoglou, llegó a ella también con 25.
Juan Miguel Echevarría la alcanzó con un año más que el espirituano, 19.
Es la tercera mejor marca mundial juvenil de la historia, para menores de 20 años, detrás del 8,38 del italiano Mattias Furlani, en Roma, el 28 de junio de 2024; y del 8,35 del ruso Sergey Morgunov, el 20 de junio de 2012, en Cheboksary.
Es la mejor marca del año para juveniles, es decir menores de 20 años.
Es el tercer mejor registro de este 2025, incluyendo todas las categorías, detrás de Tentoglou (8,46), de Furlani (8,37), y compartido con otros cuatro atletas: los jamaicanos Tajay Gayle y Carey McLeod, el suizo Simon Ehammer, y el australiano Liam Adcock.
Ese registro lo convierte en el primer saltador cubano en inscribirse en el Campeonato Mundial de septiembre, en Japón, al superar la exigencia de 8,27.
La marca lo convierte en el recordista nacional juvenil de Cuba en esta especialidad.
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Edelso dijo:
1
2 de julio de 2025
05:02:50
Ramon dijo:
2
2 de julio de 2025
10:46:52
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