Se estrecha la puerta de la clasificación de la Liga Élite

No hay forma, cuando se es madera, el hacha te corta como quiera, y así le pasa a Industriales con Las Tunas. Ni con los atributos de uno de los mejores lanzadores del país, Andy Vargas, ni doblándole los Azules la cantidad de jits conectados, pudieron escapar de los mortales hachazos de los Leñadores.

Ayer los tuneros volvieron a vencer a los Leones, en lo que fue su victoria número 14 en los últimos 15 partidos ante los capitalinos, y de ellas, la octava de manera consecutiva.

Vargas soportó siete jits en igual cantidad de inning, solo que cinco de esos imparables fueron en la primera entrada, incluyendo los vuelacercas de Yosvani Alarcón y Jean Lucas Baldoquín. Después que logró sacar el tercer out de esa entrada y hasta la séptima, al pitcher industrialista solo le pudieron pegar otros dos incogibles.

Pero ya el mal estaba hecho, porque los de La Habana, aunque batearon 17 inatrapables, por nueve de sus rivales, fueron incapaces de fabricar carreras frente al pitcheo de verdirrojo.

Si Industriales no se rebela frente a la «paternidad» tunera, entonces la Liga se puede poner gris con pespuntes negros en su último segmento clasificatorio

Sin embargo, no es la «paternidad» tunera sobre Industriales lo más llamativo de la jornada de ayer, sino que Pinar del Río, al menos en esta lid es casi un «padrino» de Granma. Por segunda vez en el calendario teje una cadena de tres éxitos consecutivos, y ambas encima de los Alazanes.

Ese trío de triunfos ha puesto a los vueltabajeros a solo un juego de los Azules y de las Avispas santiagueras, ocupantes hoy de los puestos tres y cuatro, dejándoles el sótano a los granmenses. Pero sí hoy tuviéramos los mismos resultados de ayer, los Vegueros, entrarían en zona de clasificación aun cuando no estarían dentro, pues solo empatarían a los de la capital, porque tienen perdida la serie ante ellos.

Los santiagueros ayer se las gastaron todas en la quinta escena ofensiva en su porfía contra el líder Ciego de Ávila, aunque, a decir verdad con solo tres jits, de ellos un doble, lograron un racimo de siete. ¿Saben por qué? Porque la oveja negra de la iii Liga Élite se posó arriba de los Tigres, tres errores fueron responsables de cinco anotaciones.