Pinar del río.–Los Lobos de Pinar del Río se coronaron este fin de semana como monarcas del Torneo Nacional de Clubes Campeones de beisbol, al ganar como locales el doble juego programado a los Sultanes de Holguín, por 4-2 y 4-0, en el Estadio Capitán San Luis.
Del brazo de dos lanzadores con experiencia en series nacionales, Frank Luis Medina y Gabriel Cantero, los pinareños certificaron su paso invicto en el certamen, y sumaron su quinto trofeo en estas lides, para empatar con Guantánamo como los máximos ganadores.
Medina permitió dos carreras sucias en el capítulo de apertura, por dos errores del camarero Juan Manuel Pérez, más sencillo impulsor del receptor Nelson Batista. La pelota recompensa, y Juan Manuel pegó tubey que trajo a casa la primera de los pinareños.
En el sexto, tras la salida del abridor José Antonio Sánchez, quien se mostró dominante en cinco capítulos, llegó la rebelión pinareña de tres anotaciones, ante el relevista Jesús Enrique Pérez. Dos pifias del antesalista Jolbert Naranjo se ligaron con oportunos cañonazos de Marlon Moreno y Ronaldo Pérez, para definir el choque.
Medina logró su cuarto triunfo, al caminar la ruta completa, una trayectoria que fue premiada con la condición de jugador más valioso del torneo. «Salimos abajo en el marcador, pero animé a mis compañeros; estaba muy confiado en que podíamos remontar. He disfrutado mucho este campeonato, me ha dado la posibilidad de jugar en Cuba, después del tiempo en contrato, y ha sido la mejor preparación para la cercana Liga Élite», dijo a Granma.
En el segundo encuentro, los lobos explotaron temprano al abridor José Manuel Rivas, quien permitió dos carreras, con par de indiscutibles, y regaló igual cantidad de boletos. Su relevo, Jesús Quintán, hizo un buen trabajo de contención hasta el capítulo final, pero no recibió apoyo ofensivo de sus compañeros, maniatados por los envíos del zurdo Gabriel Cantero.
«Estaba preparado para lanzar completo, aunque este equipo tiene buenos relevistas. La clave estuvo en combinar los lanzamientos y en su colocación. Llevamos tiempo preparándonos para la Liga Élite, con los profesores Cortina, Bosmenier y Abel Madera, de ahí que estuviéramos confiados en este resultado», afirmó Cantero.
El título pinareño, bajo las órdenes de Donald Duarte, se une a los alcanzados por Alfonso Urquiola en las tres primeras ediciones, y al de Primitivo Díaz, hace ya dos décadas.
El hecho de no apelar al championismo y sí a desarrollar la cantera, es digno de destacar. El conjunto que se coronó tiene en su nómina a consagrados en la pelota nacional, como William Saavedra y Luis Pablo Acosta, pero ninguno vio acción en la competencia.
«Sabemos que tenemos que desarrollar los talentos, es la única vía para que la provincia se mantenga en los planos estelares. Estoy muy feliz, pues dirigir a estos muchachos no ha sido fácil. Son muy jóvenes, cada uno es un mundo aparte, y logré que me vieran como un padre; eso lo aprendí con Alfonso Urquiola», aseguró Duarte.
Este evento nos demostró cuánta falta nos hace la pelota como espectáculo cultural. Alrededor de 7 000 personas coparon el Capitán San Luis, que vistió sus mejores galas para esta gran final. Por suerte, se seguirá jugando. La tercera Liga Élite está a la vuelta de la esquina.
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Justo dijo:
1
3 de marzo de 2025
13:30:46
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