Hay una imagen que guardo de uno de los sábados de La utopía, en El Diablo Tun Tun de la Casa de la Música de Miramar y que retrata, como pocas, la personalidad de Fidel Díaz Castro. El periodista y trovador, director de la revista El Caimán Barbudo, inicia la peña como si en ello le fuera la mitad de su vida, toma la guitarra con la convicción de quien defiende una de esas verdades irrefutables y, sin perder tiempo, comienza a hablar con vehemencia sobre la necesidad de que en la Cuba de hoy existan espacios que no se rijan por las engañosas leyes de la rentabilidad y den voz a esos creadores que, pese a todo, no entregan las armas a la hora de poner en marcha obras con calidad que responden, como una cuestión de vida o muerte, a los dictados más íntimos y honestos del espíritu.
La utopía dio refugio a un amplio número de trovadores de todas las generaciones y fue el punto de partida para otros proyectos impulsados por el incansable espíritu del Fide, como lo llaman sus amigos más cercanos, es decir, toda la familia trovadoresca y del Caimán Barbudo. Casi nada.
La pupila asombrada es una de esas propuestas que tomaron como base aquella peña sabatina para continuar dando relieve a la canción inteligente, como gusta decir al “Fide”, que no es otra cosa que la palabra cultura escrita con mayúsculas. La Pupila se realiza los últimos viernes de cada mes en el Hueco del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en G y 21.
“Hablamos de la confluencia de caminos andados creativamente por varios amigos. Iroel Sánchez con su blog La Pupila Insomne, me embulla para que abra el blog El Diablo Ilustrado. Luego Iroel va a la peña que yo hacía con el trovador Ihosvany Bernal en el Tun Tun de la Casa de la Música de Miramar, La utopía donde se hacían descargas de trovadores y se pasaban tiras de videos de la canción poética (no digo alternativa porque ya se le llama así a cualquier cosa) cubana, latinoamericana, universal. Le pareció muy bien —necesaria— la propuesta, y empieza a maquinar la manera de hacerla en un lugar más céntrico, y agregándole ingredientes audiovisuales, entrevistas en vivo, el uso de las nuevas tecnologías… una especie de cabaret de las ideas”, dice el Fide a Granma en medio del diseño de la próxima edición de este espacio que este viernes tendrá como invitado, al trovador santaclareño Roly Berrío.
“En este espacio —agrega— se ofrecen los videos que proyectamos, más libros, música y ahora los contenidos del programa televisivo (videoclips, películas, series, documentales) en un Wifi (red inalámbrica)que además tiene un chat, se abren debates buscando remover ideas, intercambiar información, contar con un espacio con una poética donde se goce desde la más profunda espiritualidad y donde estén disponibles materiales que los medios no suelen divulgar”.
El Fide recuerda cómo La pupila llegó a la televisión donde se pasa cada sábado, de 5:15 p.m. a 6:00 p.m. en el Canal Educativo 2, “un proyecto, que aunque me parecía un imposible, ya lo tenemos desde diciembre al aire. Lo primero es que hacemos el programa creyéndonos que vamos a cambiar el mundo, que somos una partida de locos con el único fin de ser útiles, de darle a la gente la opción de acceso mediante el programa a contenidos invisibilizados; para ello es imprescindible la entrega total”.
La pupila asombrada, en su versión televisiva conducida por la periodista Karen Brito y dirigida por Susana Rodríguez, es también una manera inteligente y atractiva de promover las obras con una incuestionable valía cultural alejada de las camisas de fuerza y de ese pensamiento más ortodoxo que frena, muchas veces, la promoción del arte más rompedora y genuina.
“La Pupila es un espacio en vivo, es un programa de TV, es un sitio web, —con dos blogs, además—, y tiene su extensión con una especie de “paquete” o carpeta que cada semana se ubica en los Joven Club de Computación, para que la gente pueda adquirir todo lo que sale en el programa, más algunos materiales extra relacionados. Por ejemplo, si sale un videoclip digamos del trovador Diego Gutiérrez puedes llevarte con una memoria flash, su discografía, fotos, junto a películas, documentales, cortos de ficción, reportajes informativos, libros…todos estos espacios interactúan y la gente no solo recibe materiales nuestros, también los proponen o envían, entrando definitivamente en el circuito creativo”.
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Jose Luis dijo:
1
8 de mayo de 2015
04:13:29
rolando dijo:
2
8 de mayo de 2015
08:54:52
Alejandro Sosa Aristigui dijo:
3
8 de mayo de 2015
11:22:40
Chulinena dijo:
4
8 de mayo de 2015
12:56:51
Roberto dijo:
5
8 de mayo de 2015
22:14:34
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