En una cucharadita cabe todo el SARS-COV-2 que tiene al mundo de cabeza

El volumen total de virus SARS-COV-2 que ha infectado a los humanos, prácticamente cabría en una cucharilla. Así lo ha afirmado el matemático Matt Parker, quien se refirió a datos de muestras de hisopo que sitúan en 400 000 partículas la concentración del virus en un mililitro (ML), distribuidas en dos litros de líquido, tomó en cuenta también el tamaño de una célula del virus, que es de 150 nanómetros (NM), y su forma esférica.

A partir de estos datos, el científico juntó el total de virus contenido en todos los humanos infectados, sin incluir el de los animales, para obtener un volumen de 8 ml. Todo el caos en el mundo, la pandemia que destruye vidas y socava la economía, se reduce a una cucharadita de problemas, concluye el investigador.

Esta es una poderosa razón para incrementar las medidas, comenzando por el uso del nasobuco y la constante limpieza de las manos, pues el peligro, de forma diminuta, pero de consecuencias gigantes, puede estar en cualquier parte, y está claro que no se ve.

Ante ese desconcierto, se conoció que el 73 % de 12 000 personas encuestadas en 11 países se vacunarían contra la infección con la vacuna rusa Sputnik V, según un sondeo realizado por YouGov, la empresa líder en análisis de datos y de mercado en el Reino Unido, que incluyó a ciudadanos de Brasil, Vietnam, Egipto, India, Indonesia, Malasia, México, Nigeria, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y Filipinas.

La encuesta es una de las más importantes realizadas en el tema, pues en esas naciones vive el 30 % de la población mundial, y, por primera vez, participan países del Oriente Medio y del sudeste asiático, en un estudio de este tipo.

Se ha recordado que la plataforma de vectores adenovirales humanos en la que se basa la vacuna Sputnik V, «es casi nueve veces más confiable que la plataforma de adenovirus no humanos», utilizada por otras vacunas contra el SARS-COV-2 que se estan desarrollando. Nueve de cada diez encuestados, que optaron por elegir una vacuna, prefieren una basada en adenovirus humano.

Fuente: RT