Cuba es un país heroico, pero lo que sucedió en el aeropuerto José Martí, cuando por primera vez se reunieron un Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa y un Papa, eso hace extraordinaria a la isla de la libertad. Dios ayude a todo el pueblo cubano. Así expresó el Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa, Su Santidad Kirill, casi al finalizar la Divina Liturgia oficiada este domingo en la catedral Nuestra Señora de Kazán.
En el oficio divino el Primado recordó la historia de la catedral de Nuestra Señora de Kazán, y dijo celebrar la liturgia con un sentimiento muy particular, precisamente porque hace 45 años había sido consagrada la primera parroquia ortodoxa rusa, antecedente de la actual.
Asimismo, rememoró la conversación con Fidel de la cual surgió la idea del templo, diálogo que le permitió hablar sobre la importancia de la Iglesia Ortodoxa Rusa en la historia de su país.
Yo voy a seguir rezando por Cuba, voy a seguir rezando por usted y por su hermano —dijo refiriéndose a Raúl y Fidel—, con quien tuve el placer de reunirme ayer, por el pueblo cubano y por los cristianos cubanos.
El Primado manifestó sentirse feliz por la presencia de las autoridades de la Iglesia Católica y de Raúl; y en recordación al día entregó una imagen de Nuestra Señora de Kazán y unas vestiduras para el templo; e íconos de El Salvador a cada uno de los participantes, para que los lleven a sus casas.
En la Divina Liturgia se encontraban presentes, además, los miembros del Buró Político Miguel Díaz-Canel Bermúdez, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros; el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo Hernández; Mercedes López Acea, vicepresidenta del Consejo de Estado y primera secretaria del Partido en La Habana; Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores; otros dirigentes del Estado y del Partido; así como el Cardenal Jaime Ortega Alamino, Arzobispo de La Habana; fieles de esa religión y representantes de diversas iglesias cristianas en Cuba.
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