Benítez sube como la espuma

CULIACÁN, México.—Cuando la 56 Serie Nacional de Béisbol comenzó en agosto del 2016, nadie imaginaba que Carlos Benítez se convertiría en uno de los principales candidatos para defender la segunda base del equipo Cuba en cualquier evento internacional.

Ni siquiera el propio intermedista granmense se visualizaba entre los con­tendientes para defender el uniforme de las cuatro letras, pero un rendimiento notable durante toda la campaña y, sobre todo, su sangre fría en los partidos más importantes de la temporada para los Alazanes, lo catapultaron como candidato potencial.

«No me veía, para qué mentirte», me confesó sonriente Benítez en el parque Latinoamericano, donde el plantel dirigido por Carlos Martí ultimó los detalles de su preparación antes de partir rumbo a la Serie del Caribe de Culiacán, México, que comenzará este miércoles con el duelo entre Cuba y República Dominicana (5:00 p.m., hora de nuestro país).

«Me gané el puesto entre los 50 preseleccionados al Clásico Mundial por el rendimiento del año, pero los play off tuvieron un peso decisivo. Me vio Cuba entera, la prensa también nos siguió de cerca, algo que no ocurre casi nunca porque no fuimos un equipo mediático», precisó el camarero de 28 años.

Por supuesto, este desempeño no lle­gó por arte de magia. Carlos Benítez afrontó un riguroso programa de entrenamiento que, unido al oficio ad­quirido por espacio de 12 series nacionales, lo ayudó a establecerse como puntal ofensivo de los Alazanes en la primera ronda, cuando no estaban los refuerzos, ni Roel Santos, ni Alfredo Despaigne.

«Yo he estado más concentrado, llevo bastante tiempo jugando y cada vez tengo más confianza. Salgo al terreno sin ningún tipo de presión, tanto al campo como a la ofensiva, y también estudio con detenimiento a los rivales, algo que cuando uno es joven no se lo toma tan en serio», afirmó Benítez.

«Siempre se ha criticado a Granma por su mala defensa, pero este año dimos un salto. Me sentí genial, tal vez porque la combinación de cuadro jugamos juntos desde la Provincial con el municipio de Yara», apuntó el granmense, quien también ha logrado controlar su peso corporal.

«Mi familia es obesa y yo de tomar agua engordo, pero he hecho dietas, aeróbicos y me siento en forma», señaló Benítez, listo para el reto de Culiacán.

«Vamos a un evento duro, muy du­ro. Los rivales tienen más horas de carretera que buena parte de nuestros muchachos, jugando en un béisbol de nivel, superior al de la Serie Nacional. Hay que salir con garra, nos reforzamos bien, y hacer un buen papel está al alcance», concluyó.