Ante el genocidio de Israel en Gaza no se admite la pasividad ni la naturalización del conflicto. Tampoco creer que, por producirse en un país lejano, no toca ser parte de él, pues cada día se demuestra que la única forma de vencer al odio y al egoísmo imperial es luchando contra esas fuerzas de poder, que necesitan esclavizarnos para sobrevivir.
Así lo dijo el secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de España, Manuel «Manu» Pineda Marín, en el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.
Expresó que el conflicto se inició a finales del siglo XIX, con las ansias expansionistas del imperialismo.
Expuso, con ejemplos, cómo el nazismo y el sionismo tienen la misma esencia depredadora. Pineda insistió en que las intenciones mediáticas para convertir a los palestinos en terroristas deben cesar, como también debe finalizar el apoyo que brinda Estados Unidos a esa agresión, en la que involucra a la Unión Europea, «que no tiene política exterior propia», sino que se muestra como el «mayordomo» de la Casa Blanca, aseguró.
Apuntó que el 7 de octubre, cuando iniciaron los bombardeos de la actual escalada del sionismo, habían más de 5 200 palestinos en las cárceles israelíes, que no fueron mencionados en los medios de prensa. Hoy esa cifra asciende a más de 10 000.
«La pesadilla de la Franja de Gaza no es una crisis humanitaria, es la pesadilla fuera de casa, es una crisis de la humanidad. Debemos detenerla para que no se repita en otro lugar, y para que podamos tener un futuro para la humanidad», sentenció Manu Pineda.
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