ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Jhonson deja a Reino Unido sumido en una profundo crisis económica, con la mayor inflación registrada desde 1982. Foto: France 24

«Estoy triste por dejar el mejor trabajo del mundo», confesó este jueves Boris Johnson, tras verse obligado a dimitir como primer ministro del Reino Unido y líder del Partido Conservador.

Lo de «triste» puede creerse, pero el calificativo de «mejor trabajo del mundo» parece una copia fiel de los autoelogios que se hacía Donald Trump cuando enrumbaba a Estados Unidos hacia el precipicio y el descrédito.

En los últimos meses de su mandato, el premier británico quiso liderar el fomento de la guerra en Ucrania, compitiendo con Estados Unidos en cuanto al envío de recursos bélicos y en los listados semanales de nuevas sanciones contra Rusia. Fue de los primeros líderes europeos en viajar a Kiev.

Parecía dar los últimos coletazos de una vida infectada por otros males políticos que lo fueron llevando hacia el abismo. En otras palabras, se sabía perdido y buscaba desviar la atención con una agitada agenda que pronto se ha desmoronado.

No hay duda de que los problemas no son nuevos ni están circunscriptos a la figura de Johnson; más bien forman parte de un sistema que no ha podido resolver su propia vida política y desarrollo, aunque se haya salido de la Unión Europea o que quiera mostrar una estabilidad económica y política que no es tal.

No ha sido casual que 57 miembros de su Gobierno hayan dimitido en las últimas semanas.

Johnson, en el cargo desde julio de 2019, deja el Reino Unido sumido en una profunda crisis económica, con la mayor inflación registrada desde 1982, según reflejan despachos de prensa.

No obstante, al presentar su dimisión, aseguró sentirse «inmensamente orgulloso» por los logros de su Gobierno, como el Brexit, la crisis de la pandemia y el hacer frente a la agresión rusa en Ucrania.

Por su parte, el opositor Partido Laborista calificó de «profundo» el daño que ha causado el Partido Conservador al país durante su mandato: «Doce años de estancamiento económico, 12 años de servicios públicos en declive, 12 años de promesas vacías», apuntó Keir Starmer, líder laborista, en las redes sociales.

Para algunos medios, la gota que colmó la taza fue un informe sobre lo que se ha llamado el escándalo Partygate, relacionado con la celebración de varias fiestas en el número 10 de Downing Street –donde vive y trabaja Johnson– durante el primero y segundo confinamientos nacionales por la pandemia de la COVID-19.

Los eventos se realizaron cuando las normas sanitarias prohibían las reuniones sociales en el país.

Con la renuncia de Boris Johnson, sumarían tres (recuérdese a David Cameron y Theresa May) los primeros ministros que han tenido que dimitir desde que se produjo el Brexit en 2016; o sea, tres en los últimos seis años.

 

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Me encanta Barbara Eden dijo:

1

7 de julio de 2022

17:45:17


Como se dice en inglés: good riddance to bad rubbish!

Pelegrin dijo:

2

7 de julio de 2022

21:53:25


Claro el capitalismo y sus intereses al menos queda la tranquilidad q la presión los aleje de las ambiciones