No hay dudas de que quien controle la tecnología 5G, ese «gran océano digital», como califican expertos, tendrá una posición ventajosa en la gobernanza del mundo en el futuro y en esa carrera sin precedentes todas las estadísticas apuntan, por primera vez en décadas, que no será EE. UU. quien lidere esa lista.
Ya es sabido que la mayor empresa de telecomunicaciones china, Huawei, lanzó su primer teléfono inteligente con 5G para su uso comercial y, además, dio a conocer que próximamente estará a la venta el modelo Mate 20 X que ya obtuvo la primera licencia de acceso a la red 5G del país asiático, a pesar de los esfuerzos de Estados Unidos por impedirlo.
«El nuevo modelo ya ha empezado a recibir los primeros pedidos», aseguró el jefe para la división de telefonía móvil de la empresa, He Gang, durante la ceremonia de lanzamiento en Shenzhen, en la provincia de Guangdong, en el sur de China, el pasado 26 de julio.
El Huawei Mate 20 X saldrá al mercado el próximo 16 de agosto a un precio de 6 199 yuanes (unos 900 dólares, mientras que los dispositivos más recientes de la compañía estadounidense Apple –el iPhone XS–, que funcionan con tecnología 4G, se valoran aproximadamente en 1 100 dólares).
«El nuevo ‘imperio ascendente en la carrera por la tecnología 5G podría ser el de China, de la mano de la compañía tecnológica Huawei», afirmaron especialistas en el tema, el jueves último durante el programa Keiser Report, de la agencia RT. Muchos coinciden en que EE. UU. ya ha perdido la carrera de la 5G, pues las empresas chinas poseen la mayoría de las patentes de esta revolucionaria tecnología y no hay grandes compañías estadounidenses fabricando o desarrollando equipos de telecomunicaciones con estos fines.
EL DILEMA POR EL EQUILIBRIO DEL PODER
El equilibrio del poder ya está cambiando, pues China ya no solo le lleva la delantera en el desarrollo de la 5G, sino que por primera vez ha sobrepasado a EE. UU. en el ranking Global Fortune 500, una lista que desde hace tres décadas da a conocer a las empresas más grandes del mundo según sus ingresos. En dicha lista aparecen unas 121 firmas estadounidenses y 129 empresas chinas, según información de la BBC.
«China es el poder emergente, económicamente más pequeño, pero que crece más rápido», apunta la publicación, aludiendo a los ingresos del total de empresas chinas que aparecen en la lista que –aunque solo representan el 25,6 % de todo el Global Fortune 500– ya se acercan a las estadounidenses que abarcan un 28,8 %).
Todo indica ahora que EE. UU. recurre a acusar a China de robar patentes y a exigir a otras naciones que no colaboren con Beijing y Huawei, aunque en la reunión en la Cumbre del G20, el presidente Donald Trump suavizara su postura y dijo que permitiría que se le vendan componentes estadounidenses.
Este miércoles, y tras apenas cuatro horas de negociaciones a puerta cerrada entre ambos países, las delegaciones posaron para una foto de familia y –según precisa Telesur– el representante estadounidense de Comercio, Robert Lighthizer, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, se fueron al aeropuerto sin hacer ninguna declaración.
La portavoz de la Cancillería china, Hua Chunying, culpó a EE. UU. y calificó de fracaso esta décimo segunda ronda de conversaciones, alegando que Washington dio un giro repentino y cambió su postura mientras dialogaban. Aunque se anunció que volverían a reunirse en septiembre, el viceprimer ministro chino, Liu He, quien estaba al frente de la delegación asiática, tampoco emitió criterios al respecto.
Para EE. UU. está en juego su supremacía en el área tecnológica, con lo cual ahora presiona a sus aliados para que no soliciten los dispositivos del gigante asiático. Además, siguen en vigor los aranceles valorados en miles de millones de dólares que fueron impuestos sobre la importación de bienes y han dicho de forma reiterada que las tensiones persistirán mientras Beijing no cambie la forma como la economía china ha crecido durante las últimas cuatro décadas, elimine los subsidios a las empresas estatales, abra su mercado interior y rinda cuentas si no cumple con alguno de estos compromisos.
Todo parece indicar que el curso de las relaciones comerciales entre ambos países aún es incierto.
COMENTAR
Cubaneo dijo:
1
1 de agosto de 2019
10:34:14
Responder comentario