Se entiende por cibercrimen toda actividad criminal o ilegal que se realiza empleando internet, y puede lo mismo ser realizada por un único sujeto, grupo u organización estructurada, según códigos delincuenciales. Son ejemplos de esta práctica: a) robo de contraseñas; b) uso inadecuado de informaciones de carácter personal; c) distribución y/o instalación de virus y otros programas maliciosos; d) suplantación de identidad; e) toma inautorizada de control sobre una computadora, o conjunto de ellas; f) instalación de programas informáticos con la intención de robar datos, controlar la gestión (de uno o varios equipos) o causar daño a personas, negocios, empresas, organizaciones o instituciones; g) el espionaje industrial; h) incitación al terrorismo; i) transmisión de discursos de odio; j) lavado de dinero; k) tráfico de drogas; l) tráfico de armas; m) participación en redes de prostitución; n) distribución de pornografía infantil; o) ciberacoso; p) corrupción de menores en las redes; q) fraude en diversos grados de alcance territorial y organización; r) bloqueo y colapso del acceso o funcionamiento de las comunicaciones digitales en un determinado sitio (que incluso puede ser un país).
El espectro del cibercrimen comprende un tipo de práctica cuya particularidad radica en que solo es posible mediante el empleo de las llamadas nuevas tecnologías de información y comunicación; por este motivo, el alcance de la definición resulta válido para el uso criminal de toda clase de aparatos digitales que puedan ser conectados a internet (computadoras, tablets y teléfonos móviles), para cumplir con los propósitos antes mencionados.
La ubicuidad de los actores y las posibilidades que la red ofrece para establecer con facilidad agrupaciones transnacionales, la velocidad de las intervenciones y flujos de mensajes, las diferencias entre legislaciones en los diversos países son, entre otros, algunos de los factores que complejizan el escenario internacional del cibercrimen.
La expansión de semejante accionar dañino para comunidades y personas, al mismo tiempo que violatorio de la ley, ha traído asociada la aparición de formas de vigilancia y control de los tráficos en las redes, a la vez que ha conducido a la profundización del concepto ciberseguridad y las prácticas y estructuras que le son correlativas. La enorme importancia de las comunicaciones digitales en el mundo de hoy justifican la atención prioritaria que merecen las manifestaciones de cibercrimen y las políticas de ciberseguridad.
COMENTAR
Roxana dijo:
1
21 de noviembre de 2022
07:21:13
Responder comentario