10 de agosto de 2006 En defensa de la
soberanía de Cuba
Baraka, Parenti, Del Toro y Morello:
Voces honestas de Norteamérica
PEDRO DE LA HOZ
pedro.hg@granma.cip.cu
A lo largo de su vida, Amiri
Baraka ha sufrido cárcel, escarnios y descalificaciones en el seno
del país donde vive.
Amiri
Baraka, antes LeRoi Jones, prominente poeta y dramaturgo.
Michael Parenti ha expresado como
pocos el desencanto ante los políticos votados por sus
conciudadanos: "Es duro creer que los líderes nos mentirían sobre
sus intenciones en el mundo, y que persiguen políticas
neoimperialistas que no tienen nada que ver con la democracia".
Innovador del lenguaje roquero en
la guitarra eléctrica, Tom Morello, junto a su colega Serj Tankian,
decidieron un día que era bueno fomentar vínculos entre los
aficionados a la música y las necesidades de revertir las más duras
realidades sociales.
Hollywood no ha hecho mella en la
estatura humana de Benicio del Toro. Actor sumamente cotizado,
ganador de un Oscar por su papel en Traffic, de Steven
Soderbergh, siempre ha defendido su identidad puertorriqueña.
Desde perspectivas diferentes,
los cuatro encarnan, como muchos otros, la lucha de la lucidez
contra la barbarie, de la razón contra la violencia. Por eso no es
casual hallar sus firmas al pie del documento
La soberanía de Cuba debe ser respetada.
Los
análisis políticos de Michael Parenti destacan por su lucidez.
Tal vez el nombre de Amiri Baraka
no les diga mucho a los cubanos inmersos en la vida cultural de la
Isla en los años sesenta. Pero si decimos que es LeRoi Jones, muchos
recordarán al autor de la obra dramática El holandés y de
El metro, que hizo época en una versión dirigida por Huberto
Llamas y protagonizada por la bailarina Gladys González y el actor
Idelfonso Tamayo, en una puesta ambulante que tuvo por escenario uno
de los ómnibus de la antigua ruta 82 (Muelle de Luz-Vedado).
Jones-Baraka (n. 1934) formó
parte de la Fuerza Aérea de Estados Unidos como artillero en los
años cincuenta, hasta que lo expulsaron por leer literatura
soviética. Se vinculó a la generación beatnik del barrio
neoyorquino de Greenwich Village, conoció a Allen Ginsberg y Jack
Kerouac; se identificó con el pensamiento y el martirio de Malcolm X
y se convirtió en uno de los más serios y acuciosos críticos de jazz
de la época. Aún en los medios académicos continuó siendo un rebelde
desde su obra poética y sus polémicos ensayos.
Tom
Morello, a la vanguardia del rock con Audioslave y fundador de Avis
for Justice, proyecto de interés social.
A Parenti se deben algunos de los
ensayos políticos más iluminadores de la segunda mitad del siglo XX
en Norteamérica. De Yale tomó los atributos académicos, pero de la
realidad llegó a conclusiones como las que plantea en Democracia
para unos pocos (1976), Inventando la realidad: política y
medios masivos (1986) y Contra el imperio (1995). Su
ensayo El asesinato de Julio César (2003), en su traducción
española, recibió una intensa recepción, motivada, según la
Editorial Hiru, que dirige la amiga Eva Forest, por la descripción
de "elecciones dirigidas por dinero, la lucha por la democracia
económica, el uso de la religión como instrumento del control
social, el abuso sexual de esclavos y el uso político de ataques
homófonos, así como la narración de una historia del imperio y de la
corrupción, de patriarcas y de mujeres subordinadas, de esclavistas
que se enriquecen, de provincias doblegadas, de escuadrillas de la
muerte y de caza de brujas política".
Cuando la Marina yanki quiso
convertir a Vieques en un polígono de sus afanes bélicos, Benicio
del Toro, asistido por su prestigio en la gran pantalla, alzó su
denuncia. "Algo así no podía pasar inadvertido —comentó—; protesté
como ciudadano".
Morello llegó a La Habana con los
ojos libres de prejuicio. Se emocionó con el hecho de que más de 70
000 jóvenes escucharan el sonido de Audioslave en la Tribuna
Antimperialista José Martí. Decididamente no comparte las ideas
socialistas, pero sí las del respeto de la diversidad cultural y la
convivencia de diversas opciones políticas. Pero apuesta por el más
elemental sentido de la razón, como cuando a propósito de Mumia Abu
Jamal, dijo: "Fue una asquerosa evasión de la justicia".
Benicio
del Toro, siempre en defensa de su identidad.
¿Miente acaso Baraka al escribir
estos versos? "Quién cercenó las manos de la gente / en el Congo /
Quién inventó el SIDA / Quién puso los gérmenes / en las mantas de
los Indios [...] Quién explotó el Maine / y empezó la guerra Hispano
Americana / Quién puso de regreso a Sharon en el poder / Quién
respaldó a Batista, Hitler, Bilbo, Chiang Kai Chek / Quién obtuvo
dinero de la guerra / Quién consiguió pasta con miedo y mentiras /
Quién quiere al mundo tal como es / Quién quiere al mundo gobernado
por el imperialismo / y la opresión nacional / el terror, la
violencia, / y el hambre y la pobreza. / Quién es el amo del
Infierno / Quién es el más poderoso".
El estado de Nueva Jersey le
había confiado a Baraka el título de Poeta Laureado antes de conocer
estos versos. Obviamente repudió luego al poeta.
Parenti seguirá siendo un
pensador incómodo para el sistema. Morello no abandonará su guitarra
innovativa y su credo irredento. Benicio dirá siempre lo que piensa.
Hoy están con Cuba. |