30 de diciembre de 2010

Me llama la atención una lectora acerca de la construcción de algunas frases de moda en el medio televisivo, las cuales presentan, cuando menos, el defecto de ir contra el principio de la economía: "estaremos informando" en vez de informaremos; "tomar la decisión", en vez de decidir, "dar una explicación", en vez de explicar... De igual modo destaca que un comunicador no debe decir lo que hará —"Les comento¼ ", "Les diré¼ " "¼ y termino con¼ ", así como otras fórmulas similares— sino ir de forma directa a la noticia. Creo que es muy importante que los comunicadores conozcan estas opiniones, de quienes son tanto lectores como televidentes.


29 de diciembre de 2010

A pesar y a pesar de son locuciones o frases conjuntivas. Significan "contra la voluntad o gusto de las personas y, por extensión, contra la fuerza o resistencia de las cosas": Lo hizo a pesar del criterio de todos. Como me escribe un lector, después de esa expresión debe seguir algo contrario a lo realizado que justifique el pesar que se siente. Lo mismo ocurre con la frase adverbial a pesar de los pesares, "a pesar de todos los obstáculos".


28 de diciembre de 2010

"Los numerales ordinales expresan orden o sucesión en relación con los números naturales e indican el lugar que ocupa, dentro de una serie ordenada, el elemento al que se refieren [¼ ] Generalmente son adjetivos, y pueden ir antepuestos o pospuestos al sustantivo, aunque suele ser más frecuente la anteposición: Vivo en el primer piso". La Fundación del Español Urgente ha reiterado que es correcto el uso de ordinales y cardinales con nombres de acontecimientos, aniversarios, celebraciones, etc., si bien resulta común utilizar el ordinal hasta 20 y a partir de esta cifra el cardinal: Sexto (o 6to.) período ordinario de sesiones, 22 Festival Internacional de Ballet. También es válido emplear números romanos: XXVI Feria Internacional de La Habana. Conviene aclarar que si no se trata de este tipo de acontecimientos, el cardinal se emplea detrás del nombre: piso quince.


27 de diciembre de 2010

Un lector me remite varias frases que evidencian esa pobreza del lenguaje, de la que les he hablado en otras ocasiones. Expresiones como: Nada, la gira fue muy buena. Nada, que estamos preparando un nuevo disco. Si algo, te llamaré más tarde. Si algo, no le digas nada, en las que los pronombres indefinidos nada y algo se indefinen hasta que, de tanto abuso, se vacían por completo de significado y golpean nuestros oídos hasta lo indecible. De igual modo, ahora todo es súper, súper y súper. Nuestro español es una lengua riquísima, cada palabra tiene un montón de sinónimos, ¿por qué no los usamos?


25 de diciembre de 2010

Según el Diccionario Panhispánico de Dudas, cuando se usa un sustantivo colectivo como núcleo del sujeto, el verbo debe ir en singular, así como los pronombres o adjetivos a él referidos y se considera incorrecto establecer la concordancia de acuerdo con el sentido plural del nombre colectivo, y no con su condición gramatical de sustantivo singular: La mayoría de los asistentes al concierto aplaudió. La concordancia en plural es admisible solo cuando se pasa de una oración a otra; en ese caso, al segundo verbo le corresponde, en realidad, un sujeto plural tácito (que se supone o infiere): La multitud se acercaba y, en cuanto veían al líder, aplaudían. En las oraciones copulativas (predicado nominal), cuyo atributo es un sustantivo, tanto el verbo como el atributo van en plural: Esta gente son asesinos; pero si el atributo es un adjetivo, es incorrecta la concordancia en plural: Esa gente es desordenada.


24 de diciembre de 2010

Entre sus acepciones, veta, del latín vitta, significa "vena", "faja o lista de una materia que por su calidad, color, etc., se distingue de la masa en que se halla interpuesta"; "filón metálico" y, en un sentido coloquial, "aptitud de alguien para una ciencia o arte". En el Diccionario de la lengua Alkona, aparece la expresión familiar descubrir la veta de uno, como "enterarse de sus inclinaciones, intenciones o designios".

Los sinónimos vetar "poner el veto" y vedar "prohibir por ley, estatuto o mandato", "impedir, estorbar o dificultar" hallan su concreción en el sustantivo veto, literalmentre "yo prohibo". Se utiliza para denotar que una determinada parte tiene el derecho a parar unilateralmente una pieza de legislación, como ocurre en el Consejo de Seguridad de la ONU.


22 de diciembre de 2010

Maestro procede del latín magíster, que significa "el que enseña", "jefe, director". Resulta curioso, que utilizamos el término maestro para referirnos al que ejerce su labor en la escuela primaria y profesor, para el que labora en los niveles superiores y, sin embargo, cuando una persona realiza estudios superiores de especialización en una maestría, se convierte en máster, cuyo plural es másteres y la abreviatura M. Sc., que equivale a "maestro en ciencias", porque, en latín, ciencia, se escribe scientia, con sc.

 


21 de diciembre de 2010

La atarraya o tarraya, del árabe, "arrojar", es palabra que se usa en Cuba, Nicaragua, Puerto Rico, Venezuela, y en algunos lugares de España como Andalucía y Badajoz. El Diccionario básico escolar, del Instituto de Lingüística Aplicada de Santiago de Cuba, la define como "red redonda provista de plomos, que se utiliza para pescar en los ríos". El DRAE la define también como esparavel, "red redonda para pescar, que se arroja a fuerza de brazo en los ríos y parajes de poco fondo". Atarraya aparece en el diccionario académico desde 1726 y tarraya desde 1925.


16 de diciembre de 2010

Hay neologismos que son absolutamente innecesarios como compact —disco compacto— o feedback —retroalimentación—. Sin embargo, hay realidades nuevas y hay que nombrarlas; por ejemplo, a mi modo de ver, resetear una computadora —palabra por la que me pregunta un lector—, es decir, "reiniciar sus operaciones", es un término útil. Es una asimilación del préstamo inglés reset al que se ha añadido un sufijo castellano de derivación, por lo que se ha creado un término híbrido. En el Diccionario de neologismos aparece reset, "botón destinado a reiniciar el ordenador".


13 de diciembre de 2010

En español, el orden de los factores sí altera el producto: ya les he hablado de que, aunque en español el ordenamiento de las palabras en una oración no obedece a criterios rigurosos, no deja de haber cuestiones lógicas que es necesario tener en cuenta. Vean, por ejemplo, el siguiente titular tomado de una publicación: "Policía detiene a asesino confeso de periodista en noreste de Brasil". ¿Acaso la idea no quedaría más clara si la escribiéramos así: Policía detiene a confeso asesino de periodista en noreste de Brasil? Como tanto el adjetivo confeso como la expresión de periodista modifican a asesino, colocar uno delante y otro detrás favorece la claridad.


9 de diciembre de 2010

Más acerca de Trivia. Este término da nombre propio a la diosa romana de las encrucijadas, divinidad bienhechora, que hace prosperar las empresas humanas o las condena al fracaso; a pesar de ser una divinidad menor, es poderosa y hasta Júpiter la respeta. Recibe este nombre, además, un juego de tarjetas popular en el extranjero, similar a lo que se conoce como ejercicio de selección múltiple; aunque, a mi juicio, el nombre está mal dado, pues las posibles respuestas pueden ser tres, cuatro y hasta cinco. Por último, Trivia es una empresa española de servicios y soluciones informáticas.


7 de diciembre de 2010

La palabra cabal procede de cabo, "extremo", "ajustado a peso o medida", "excelente en su clase", "completo, exacto, perfecto". Según el María Moliner, "se aplica a lo que se expresa exactamente", "honrado, trabajador y estimable en cualquier aspecto". Estar en sus cabales es "tener completas las facultades mentales". A carta cabal significa que la persona posee en el más alto grado las cualidades que se expresan: "honrado a carta cabal". La expresión a cabalidad, por la que me pregunta un lector, no es correcta; es preferible emplear cabalmente.


2 de diciembre de 2010

Aprovecho la pregunta de una lectora y una recomendación de la Fundación del Español Urgente para recordar que los acrónimos, términos formados por la unión de elementos de dos o más palabras —como Mercosur, de Mercado Común del Sur o Pabexpo, de Pabellón de Exposiciones— o la sigla que se pronuncia como palabra —sónar, de sound navigation and ranging; láser, de light amplification by stimulated emission of radiation, o Mined—, en caso de ser nombres propios y tener más de cuatro letras se escriben con inicial mayúscula y el resto en minúsculas. De ahí que debe escribirse: Unesco, ONU; sin embargo, algunas de cuatro letras han pasado al lenguaje común, como ovni, de objeto volante no identificado y sida, de síndrome de inmunodeficiencia adquirida.


El español nuestro

   

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