El Stabilak es un activador enzimático del sistema
Lactoperoxidasa, presente de modo natural en todos los fluidos
biológicos de los mamíferos. Tiene la finalidad de evitar la
acidificación de la leche cruda por un periodo de ocho a 72 horas
después del ordeño, en dependencia de la calidad con que fue
obtenida y de la temperatura de almacenamiento.
Su empleo cobra particular importancia cuando de
manera temporal no hay refrigeración debido a roturas de los
equipos, falta de electricidad, incidencia de fenómenos naturales y
problemas de transporte.
En la actualidad tiene un impacto muy favorable para
la conservación de parte de la leche que se distribuye a la
población mediante el sistema de entregas directas a las bodegas y
puntos de venta, aplicado ya en numerosos lugares del país.
Como precisa la doctora Lydia Tablada, directora
general del CENSA, el producto inhibe el crecimiento de las
bacterias contaminantes en el intervalo de tiempo mencionado. Su
inocuidad está plenamente demostrada en rigurosas investigaciones.
Por eso nada tiene que ver con la adición al vital
alimento de agua oxigenada, ni otras prácticas ilegales no
permitidas por los organismos internacionales encargados de proteger
la salud de los consumidores, aseveró.
Logrado por primera vez en 1992, fue sometido a
sucesivas mejoras en su formulación y diseño. Hoy constituye el
único producto comercial de esas características disponible en el
mundo.
En Cuba comenzó a emplearse a partir de esa fecha y
según estimados conservadores, hasta hoy evitó la pérdida de al
menos un tercio de los más de mil millones de litros de leche
tratados.
De acuerdo con lo expresado por la doctora Tablada,
la planta remodelada, ubicada en el CENSA, puede producir dosis de
Stabilak para alrededor de 300 millones de litros anuales.
Dificultades en la adquisición de materias primas
motivaron que en el pasado año la cantidad entregada al sector
lechero nacional cubriera la demanda de tan solo unos 66 millones de
litros, situación que debe revertirse en el primer semestre del
2010.
Actualmente, el CENSA coordina un programa para
incrementar la producción y calidad de la leche, conocido como
PROCAL, donde esa verdadera joya de las ciencias agropecuarias ocupa
un sitio prominente, junto a otros aspectos vinculados a las
adecuadas prácticas de higiene del ordeño, reducción de la mastitis
y la salud reproductiva.
Merecedor de las medallas de Oro de la Organización
Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), y de la Feria
Internacional de Invenciones de Suiza, Premio Relevante del VII
Forum Nacional de Ciencia y Técnica, y de los premios nacionales de
Innovación Tecnológica del CITMA, y de la Academia de Ciencias de
Cuba, el Stabilak está registrado y patentado en más de veinte
países.
Luego de más de una década de duro batallar en el
seno del Codex Alimentarius, organización internacional encargada
del control y normas sobre alimentos, Cuba logró el retiro de la
cláusula que prohibía el uso del sistema Lactoperoxidasa en el
mercado internacional de lácteos.
El acuerdo abre promisorias perspectivas al uso del
Stabilak a nivel mundial.