Los vínculos entre Cuba y Puerto Rico
“...Cuba y Puerto Rico son de un pájaro
las dos alas, reciben flores y balas en un mismo corazón..."
Lola Rodríguez de Tió
Hermanos cubanos:
Con esta bella metáfora, nuestra patriota, Lola Rodríguez de Tió,
considerada como la figura de mayor prestancia en la lírica
puertorriqueña, manifiesta su sentir sobre el fuerte e
indestructible vínculo entre nuestras dos naciones. Lola Rodríguez
de Tió tuvo que enfrentar persecución y fue objeto del destierro
durante el año 1887. Primero fue enviada a Caracas, Venezuela y
luego a la Habana, Cuba. Fue en la Habana en donde se identificó con
el pensamiento Martiano y eventualmente hizo suya la causa por la
libertad del pueblo cubano ante la tiranía del régimen español. Hago
referencia a este dato histórico debido a que al igual que Lola
Rodríguez de Tió, yo también creo en ese vínculo indisoluble al cual
hiciera referencia previamente. "Cuba y Puerto Rico son de un pájaro
las dos alas..." nos hace reflexionar en nuestro origen común. Dos
naciones antillanas las cuales se enorgullecen en su vasto acervo
cultural, nuestra solidaridad con otros pueblos hermanos y sobre
todo nuestra tenacidad y disposición a seguir luchando por la
defensa de lo que por derecho natural nos pertenece. El Derecho a la
vida y a la existencia pacífica con el resto de los países del
mundo. Compañeros, el tema es muy extenso, el mismo es y seguirá
siendo objeto de estudio, análisis y múltiples disertaciones. Mi
humilde propósito en esta breve misiva es el de resaltar algunos
factores comunes los cuales a través de los muchos años de historia
han servido y seguirán sirviendo de puntal entre nuestros pueblos.
Los puertorriqueños hemos participado en las guerras de emancipación
de los países suramericanos y caribeños. Cabe señalar que junto al
Libertador Simón Bolívar estuvo el General puertorriqueño Antonio
Valero Bernabé en la ciudad de Lima, Perú. El General Antonio Valero
Bernabé, era natural del pueblo de Fajardo, localizado en la zona
oriental de Puerto Rico. Por su valentía y sus proezas en contra del
régimen español se le llegó a conocer como El Libertador de Puerto
Rico. Luego se unió a la Guerra de Independencia de México, país en
el cual llegó a ser nombrado Jefe Mayor del ejército mejicano y
también se le otorgó la Medalla de los Libertadores de México.
El Libertador Simón Bolívar siempre tuvo en su agenda libertadora la
independencia tanto de Cuba como de Puerto Rico. En cuanto a este
propósito declaró: “Las islas de Cuba y Puerto Rico que entre ambas
pueden formar una población de setecientos mil a ochocientos mil
almas, son las que más tranquilamente poseen los españoles, esto
porque están fuera del contacto de los independientes. Más, ¿No son
americanos estos insulares? ¿No son vejados? ¿No desean también su
bienestar?” Esa era la preocupación expresada por Bolívar. Hermanos
cubanos, Puerto Rico “sí es americano" al día de hoy está "fuera
del contacto de los independientes, somos vejados y sí, deseamos
nuestro bienestar".
Es imposible olvidar, sería una vil aberración histórica ignorar el
papel activo y en ocasiones protagónico de los puertorriqueños en
las guerras de independencia cubanas, en ambas, tanto en la llamada
Guerra Pequeña del 1875, como en la Guerra del 1895, esta última
truncada por la intromisión del naciente imperio norteamericano en
aquel entonces liderado por las ansias expansionistas del presidente
Theodore Roosevelt. En ambas guerras se derramó sangre
puertorriqueña. La sangre es el símbolo supremo de solidaridad y
entrega incondicional de un pueblo hacia otro pueblo hermano. Así
como lo hiciera Cuba en Angola, donde fue responsable de repeler las
fuerzas surafricanas del nefasto gobierno del Apartheid. Si buscamos
en la historia cubana hallaremos de igual forma un sinnúmero de
hombres que batallaron junto a Martí y en otras partes del suelo
cubano. Cabe mencionar al General puertorriqueño Juan Rius Rivera,
quien fuera General en Jefe del Ejercito Cubano de Liberación en el
oeste de Cuba.
Otro ejemplo de la solidaridad y hermandad entre nuestros pueblos se
materializa en nuestras banderas nacionales. La bandera de Puerto
Rico fue creada en el año 1895 por la sección puertorriqueña del
Partido Revolucionario Cubano. Nuestra bandera sigue el mismo diseño
de la bandera cubana, pero con los colores invertidos.
Amigos cubanos, al día de hoy, en las alturas del siglo XXI, Puerto
Rico aún sigue siendo una colonia. Es la colonia más antigua del
mundo contemporáneo. Puerto Rico ha sabido resistir los embates de
un proceso violento de transculturación llevado a cabo por los
Estados Unidos, quienes al invadir nuestro territorio nacional en el
año 1898, establecieron el idioma inglés como idioma oficial de
Puerto Rico y la enseñanza escolar también se habría de dictar en
ese idioma completamente ajeno a los puertorriqueños. Como parte de
ese proceso de transculturación, la isla fue saturada de iglesias
protestantes las cuales respondían en aquel entonces a los intereses
norteamericanos, se convirtió en delito enarbolar la bandera
nacional puertorriqueña y se estableció el sistema económico
capitalista norteamericano, cuyo primer paso fue la devaluación del
peso puertorriqueño. Nuestra economía fue devastada por el invasor.
Nuestra isla fue convertida en una gigantesca finca destinada al
monocultivo de la caña de azúcar, en un sistema económico cuasi
feudal de agregados. Profundamente conmovido por esta realidad Don
Pedro Albizu Campos certeramente declaró: “De una nación de
propietarios, hemos pasado a ser una masa de peones”.
A pesar de habernos encontrado dentro de las fauces del imperio más
poderoso de la historia de la humanidad por más de un siglo, los
puertorriqueños hemos sabido defender nuestra lengua, nuestra
cultura hispana, así como nuestras raíces tainas y afroantillanas
que forman parte intrínseca de nuestra idiosincrasia puertorriqueña
y caribeña. Con gran sacrificio, sudor y sangre hemos conservado
nuestra personalidad deportiva dentro del movimiento olímpico
internacional y al día de hoy continuamos siendo una nación caribeña
por excelencia. Con todos los atributos tanto sutiles como concretos
que adornan a una nación (territorio, recursos, historia, lengua,
artes, ciencias, creencias, flora, fauna, próceres…)
Para terminar, Puerto Rico aún sigue siendo el campo de batalla en
el cual se libra la última guerra emancipadora de Nuestra América.
La agenda de la Soberanía y de la Dignidad de los pueblos de América
Latina seguirá inconclusa mientras Puerto Rico permanezca como
nación ocupada y enajenada del resto del mundo, sin poder ejercer
los derechos plenos que le otorgarían su soberanía. Citando al Dr.
Gilberto Concepción de Gracia, fundador del Partido Independentista
Puertorriqueño: " La libertad es indivisible. Mientras exista un
país esclavo no habrá libertad"
Hasta la Victoria Siempre.
Su compañero.
José R. Muñoz
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