Miguel D'Escoto, presidente de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, aseguró hoy estar totalmente comprometido con la causa de los cinco luchadores antiterroristas cubanos prisioneros políticos en Estados Unidos desde 1998.

En un encuentro con familiares de Gerardo Hernández, René González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González, en el primer día de su visita de trabajo a Cuba, el sacerdote y revolucionario nicaragüense afirmó que consagrará sus energías al empeño para que finalmente se haga justicia.

Calificó de absurdo el caso de Los Cinco, detenidos, juzgados y condenados por ayudar a prevenir y frustrar las acciones de grupos extremistas anticubanos asentados en EE.UU., con información oportunamente entregada, sin otra respuesta hasta hoy que el arresto de esos valerosos hombres.

Es una aberración, confirmatoria de que la pretendida guerra contra el terrorismo es una gran mentira, un pretexto para profundizar el control y dominio imperialistas sobre el mundo, enfatizó el padre D'Escoto, quien preside el sexagésimo tercer periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU.

Lamentó que la crisis global y otras urgencias le impidieran durante su mandato -a punto de concluir- ofrecer la merecida prioridad a temas desde un inicio en su agenda, como esta contradicción entre una supuesta cruzada contra el terror y el injusto trato a cinco héroes antiterroristas.

No obstante, en mi discurso final, para una rendición de cuenta, el próximo día 14, hablaré de todo esto, ratificó Miguel D'Escoto, que lamentó profundamente el sufrimiento ocasionado a René, Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio y a sus familiares, desde su detención en Miami, el 12 de septiembre de 1998.

Del caso opinó, también, que ha desprestigiado todavía más a quienes practican tales métodos, y dijo que ojalá Dios ilumine al Presidente Barack Obama, para que pueda corregir toda esta injusticia y torne creíble y real el cambio de política prometido en su campaña electoral.