MADRID, 29 mayo.— Españoles y latinoamericanos llevaron hasta el Pico de
Peñalara, la montaña más alta de la madrileña Sierra de Guadarrama, el
reclamo por la libertad de cinco antiterroristas cubanos presos en Estados
Unidos desde 1998.
Como gesto solidario a la causa de Gerardo Hernández, Ramón Labañino,
René González, Antonio Guerrero y Fernando González, un grupo de 15
improvisados alpinistas alcanzó este sábado la cumbre más elevada de la
capital española.
A la iniciativa, convocada por el Comité de Madrid por la Liberación de
los Cinco, como son conocidos internacionalmente esos luchadores contra el
terrorismo, se sumaron, además de los amigos solidarios españoles,
colombianos y chilenos identificados con Cuba.
Hasta la cresta de Peñalara, con una altitud de dos mil 428 metros sobre
el nivel del mar, llegó también una representación de jóvenes de la embajada
de la isla caribeña en España, quienes leyeron un comunicado a favor de sus
compatriotas injustamente encarcelados.
Identificarse con los Cinco no es una cuestión política, sino humana,
subrayó el manifiesto de respaldo a Gerardo, Antonio, René, Fernando y
Ramón, presos desde hace casi 13 años por el único delito de alertar a su
país de acciones violentas fraguadas contra Cuba en territorio
norteamericano.
En la cumbre de la elevación, considerada la cuna de los principales
escaladores madrileños del siglo XX y XXI, se desplegaron dos pancartas con
la imagen de los antiterroristas de la mayor de las Antillas.
Excursionistas de otros grupos ajenos a esta acción, presentes en el
lugar, se sumaron a la celebración y se tomaron algunas instantáneas con los
miembros del movimiento de solidaridad con la nación antillana.
La subida a Peñalara se enmarca en las múltiples iniciativas que desde
España, y en general de Europa y el mundo, se llevan a cabo para exigir al
presidente estadounidense, Barack Obama, la excarcelación de los Cinco.
Está inscrita, además, en la campaña europea de recolección de un millón
de firmas para reclamar a Obama la inmediata e incondicional liberación de
esos prisioneros políticos, sobre quienes pesan desmesuradas condenas,
incluidas varias cadenas perpetuas.
Alfredo Catalá, representante en España del Instituto Cubano de Amistad
con los Pueblos, valoró como todo un símbolo el acto en la Sierra de
Guadarrama.
Haber realizado este ascenso al punto más alto de la Comunidad de Madrid
constituye llevar a los Cinco a un lugar geográfico que ya ellos ocupan en
la condición humana, el de los más encumbrados valores, reservado sólo para
los héroes, exaltó Catalá.