MONTEVIDEO, 17 de junio.— Organizaciones políticas, sociales, gremiales y de solidaridad con Cuba acusaron al gobierno de Barack Obama de tener una doble moral en su pretendida guerra contra el terrorismo, al mantener en prisión a cinco luchadores cubanos contra ese flagelo.

En una declaración difundida hoy aquí, 16 agrupaciones de diversos perfiles culparon al gobierno estadounidense de presionar a la Corte Suprema para que no revisara el caso de Gerardo Hernández, René González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González.

El lunes ese órgano rechazó el pedido de los abogados de los Cinco de que se les celebrara un nuevo juicio en una ciudad distinta a la de Miami, donde en el 2001 fueron condenados a penas entre doble cadena perpetua y 15 años de prisión, por considerar aquel un escenario viciado.

El único delito de los patriotas cubanos fue infiltrar bandas terroristas del sur de la Florida para prevenir a su país de nuevas agresiones, denuncia la declaración.

Con sus presiones sobre la Corte, señala, el nuevo Ejecutivo norteamericano, como antes el de George W. Bush, practica una doble moral en su "guerra contra el terrorismo".

¿Cómo explicar, si no, que por otro lado Estados Unidos siga brindando protección a terroristas como Luis Posada Carriles y Orlando Bosch, responsables entre otros crímenes de un atentado con bomba a un avión civil cubano en que viajaban 73 personas?, pregunta.

Un comunicado en igual sentido emitió la Asociación de Cubanos Residentes en Uruguay, que calificó la negativa de la Corte Suprema de revisar el caso de los cinco como "un acto de falta de ética e irrespeto a los postulados fundamentales del derecho internacional y al pueblo cubano".

Ello confirma que el proceso contra nuestros compatriotas es político, no legal (...) y oculta el estado de necesidad de nuestro país de defenderse de las amenazas que el gobierno norteamericano alienta y encubre desde Miami, denuncia.