Los representantes del gobierno
de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), iniciaron este lunes en La
Habana el primer ciclo de diálogos de paz del año 2014, centrados
aún en el punto de la solución al problema de las drogas ilícitas.
Las partes llegan a la mesa en el nuevo año tras haber alcanzado
durante el 2013 sendos acuerdos parciales en el tema de la tierra y
la participación política.
El líder de la delegación guerrillera, el comandante Iván
Márquez, se refirió en extenso a una comparecencia del presidente
Santos a finales del año pasado en la clausura de los Cursos de
Altos Estudios Militares, a la que asistió en compañía del jefe de
los representantes gubernamentales a los diálogos, Humberto de la
Calle.
En un comunicado leído tras su arribo al capitalino Palacio de
Convenciones, sede habitual de los diálogos, Márquez criticó que
Santos minimizara el alcance de los entendimientos logrados en la
problemática agraria y la transformación del sistema político
colombiano.
Asimismo, el guerrillero utilizó las palabras del presidente
respecto al tema de las drogas ilícitas para sentar las posiciones
de las FARC-EP al respecto. "Considera el Presidente que el tercer
punto en discusión, el narcotráfico, es un tema fundamental, y
aventura que sin él, posiblemente las FARC y el ELN (Ejército de
Liberación Nacional) no estarían hoy donde están".
"Nosotros decimos que —aclaró—, sin el narcotráfico que ha
necrosado hasta los tuétanos la estructura del Estado colombiano,
las FARC y el ELN no estarían donde están; porque sin la
gansterización del régimen, sin desigualdad ni tanta miseria, no
habría alzamiento armado".
El líder guerrillero concluyó que la llama de la esperanza de la
paz que hoy "titila" se mantendrá viva solo si el gobierno está
dispuesto a propiciar cambios efectivos que signifiquen democracia y
dignidad, "y si los colombianos atisban en el horizonte, que por
fin, podremos tener patria".
La delegación gubernamental no hizo comentarios a la prensa este
lunes tras su arribo a la sede de los diálogos. Humberto de la Calle
ofreció unas breves declaraciones el domingo antes de partir hacia
La Habana, en las que aseguró que están decididos a trabajar con las
FARC-EP para alcanzar la paz.
Según el exvicepresidente, el Gobierno está "preparado" para
hacer frente a las críticas y a la "controversia" propia del periodo
electoral que se avecina con los comicios parlamentarios del 9 de
marzo y presidenciales del 25 de marzo.