QUITO,
Ecuador.— La causa de los luchadores antiterroristas cubanos que han
sufrido injustas condenas en cárceles norteamericanas estremeció
este jueves el XVIII Festival Mundial de la Juventud y los
Estudiantes, durante un foro de solidaridad con la Isla al que
asistieron delegaciones de todo el orbe y donde quedó demostrado que
la batalla por el regreso a su Patria es, por esencia, de los
jóvenes.
Ante un numeroso auditorio, Irmita González, la hija del Héroe
René González, compartió detalles del caso judicial y de las duras
vivencias que han tenido que soportar durante los últimos quince
años. No ha sido fácil, dijo, pero no nos hemos sentido solos,
contamos con el cariño y la bondad de miles de jóvenes en todo el
mundo. "Los Cinco necesitan de nosotros, por ellos tenemos que ser
más certeros, no divagar y tomar las experiencias que han sido más
efectivas para multiplicarlas", consideró.
Contó que su padre, aun cuando ya está en Cuba, sufre por no
haber regresado junto a sus hermanos de lucha. "Disfruto a mi padre
a medias, porque su corazón sigue estando preso mientras Fernando,
Ramón, Antonio y Gerardo sigan cargando condenas inmerecidas.
Sigamos luchando todos juntos para que en el próximo Festival
Mundial estén todos ellos en un foro como este para agradecer a los
jóvenes por la victoria final".
Ailín Labañino, la hija de Ramón, dijo que "no podemos alejar a
los Cinco, no podemos verlos solo como símbolos, como héroes fríos.
Cada uno de ustedes debe ponerse en el lugar de las familias y
pensar que ellos pueden ser padres o tíos de cualquiera de los que
estamos aquí en este Festival".
Quince años es mucho tiempo, comentó, los hijos y sobrinos de los
Cinco hemos vivido más de la mitad de nuestras vidas batallando para
que nuestros familiares regresen al hogar. Dijo que no imaginaba a
su padre sin el traje gris de la prisión y narró la vez que luego de
dos años le fue otorgada la visa, pero estuvo 30 días en Estados
Unidos sin ver a su padre porque dos asesinatos cometidos en la
prisión provocaron el castigo de aislamiento para todos los presos,
incluyendo a Ramón. "Esa fue una de las experiencias más dolorosas
de mi vida, tan cerca de mi padre y sin poder verlo".
Luego de estas sentidas intervenciones que provocaron las
lágrimas a muchos de los que se reunieron en una de las carpas del
Parque del Bicentenario, delegados de varias naciones pidieron la
palabra para compartir sus experiencias. Jóvenes de Canadá,
República Popular Democrática de Corea, Vietnam, Siria, México,
Estados Unidos, Cuba, Brasil, entre otros, comentaron las
iniciativas que desarrollan en sus países, mostraron el compromiso
con esta batalla y prometieron no descansar en el empeño de dar a
conocer este caso en sus naciones.
Entre ellos estuvo el joven Jacob, de Estados Unidos, quien dijo
que "para los revolucionarios norteamericanos los Cinco son del tipo
de personas que queremos ser. El mayor desafío que tenemos es el
desconocimiento, en nuestras escuelas no nos enseñan nada sobre Cuba
porque le temen al ejemplo de su Revolución".
Por la parte cubana, Jorge Jerez, agradeció las muestras de amor
hacia su Patria. Dijo que cuando conoció el caso de los Cinco apenas
tenía nueve años y desde entonces no ha dejado de luchar por ellos.
La causa de los Cinco es indiscutiblemente de los jóvenes, solo a
nosotros se nos pueden ocurrir las ideas más renovadoras para lograr
su liberación. Cada día que pasen en prisión es una afrenta a la
justicia, una afrenta a los jóvenes de buena voluntad de todo el
mundo", concluyó.