La
Comisión Europea evitó hoy hacer comentarios sobre el plan de
Escocia para la independencia, pero ratificó que si esa provincia
británica se separa el Reino Unido, deberá pedir la adhesión al
bloque regional.
El vocero de la Comisión, Oliver Baillo, afirmó que
la posición del grupo de los 28 no ha cambiado, por lo cual si una
región se independiza de un país miembro, para ingresar a la Unión
Europea debe solicitarlo e iniciar el proceso.
Sobre el Libro Blanco presentado hoy por el primer
ministro escocés, Alex Salmond, un documento emitido como plan para
la independencia, indicó no tener comentarios pues se trata de un
asunto interno del Reino Unido.
De acuerdo con la legislación europea, si Escocia
finalmente se separa de la nación británica, tendrá que hacer todo
el proceso necesario para volver a entrar al bloque y su admisión
deberá ser aprobada por todos los estados miembros.
La cuestión de la independencia se definirá en un
referendo previsto para el 18 de septiembre de 2014, en el cual los
ciudadanos de la región votarán a favor o en contra.