El
presidente estadounidense Barack Obama presentó el etanol (un
alcohol fermentado y destilado derivado del maíz) como "el
combustible alternativo más exitoso que hemos producido",
anunciándolo como "una alternativa verde" a miles de millones de
litros de gasolina.
De acuerdo con el informe de AP, desde el 2007,
cuando el Congreso de EE.UU. exigió a las compañías petroleras que
incorporasen etanol a su gasolina, este fluido ha pasado a ser el
combustible renovable más importante del país.
Cuando es quemado, el etanol emite menos dióxido de
carbono que la gasolina. Por eso este combustible es un componente
central de la política medioambiental del Gobierno estadounidense.
Una política que ha alentado a los agricultores a buscar nuevos
lugares y cultivar millones de hectáreas con maíz, incluso en zonas
protegidas, acabando con 5 millones de hectáreas de suelo de
conservación.
Además, el boom del maíz ha aumentado el uso de
fertilizantes contaminantes en los canales y ríos del centro del
país.
"Esto es un desastre ecológico", dijo Craig Cox, del
Grupo de Trabajo Ambiental de la agencia AP.
Según ambientalistas y científicos, tras analizar
todos los factores, el etanol derivado del maíz no es una estrategia
viable para combatir el calentamiento global.
Sin embargo, el informe ha sido duramente criticado
por la Casa Blanca, que considera que el documento contiene "errores
e imprecisiones". Por su parte, Mike Oreskes, vicepresidente de la
agencia de noticias replica que "los reportes de AP sobre este
importante tema son resultado de meses de trabajo y revisión de
documentos, así como entrevistas con expertos y gente de todo el
espectro del debate de políticas públicas en torno a este recurso
energético". "Respaldamos nuestros reportes y aceptamos con gusto la
discusión y nuevas aportaciones al tema", añade.