Declaran estado de calamidad en Filipinas
El tifón Haiyán, ahora un poco más debilitado,
dejó decenas de muertos y heridos en su paso por Vietnam y China
MANILA.— El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, declaró este
lunes el estado de calamidad nacional luego de la devastación
causada por el supertifón Haiyán, que tocó tierra en ese país poco
antes del amanecer del viernes con vientos sostenidos de 314
kilómetros por hora y rachas de hasta 379.

El tifón dejó zonas completamente arrasadas en Filipinas.
Desde Tacloban, una de las ciudades más afectadas, el Presidente
dijo que la prioridad del Gobierno es restablecer la energía y las
comunicaciones, así como acelerar la entrega de ayuda a los
sobrevivientes.
En Tacloban, ubicada en la isla de Leyte, se estima que murieron
diez mil personas por causa del impacto directo del fenómeno
natural. Se calcula que otros cientos perdieron la vida en el resto
del país del sudeste asiático.
El director de la Cruz Roja de Filipinas, Richard Gordon,
describió la devastación como un "caos absoluto" y aseguró que se
están tratando de limpiar los caminos para poder llevar alimentos,
ropa, medicinas y agua potable a las áreas más remotas, según BBC
Mundo.
Un enorme esfuerzo de asistencia internacional se ha puesto en
marcha en Filipinas, con el envío de alimentos y otros productos de
primera necesidad.

Los caminos están bloqueados por montañas de escombros, lo cual
perjudica la llegada de la ayuda a las zonas devastadas.
En la madrugada el tifón Haiyán entró en Vietnam por el Norte,
cerca de la famosa Bahía de Hang Long, pero con una categoría mucho
más reducida y vientos sostenidos de 140 kilómetros por hora.
Al menos 13 personas perdieron la vida y otras 81 resultaron
heridas en seis provincias en el centro y el norte de la nación
indochina, según el Comité Nacional de Búsqueda y Rescate. Casi 600
mil personas fueron evacuadas.
La zona más afectada fue la provincia de Quang Ninh, en el norte
del país y fronteriza con China, donde se registraron rachas de
viento de 120 kilómetros por hora que derribaron árboles y
arrancaron tejados y postes eléctricos.
En China, el paso del tifón había dejado este lunes al menos ocho
muertos, según Xinhua. Dos de ellos son tripulantes del buque
mercante que quedó a la deriva cerca de la isla de Hainan. Otras
cinco personas de la tripulación siguen desaparecidas.
La alerta roja, la máxima prevista para casos de emergencia,
sigue activada por las intensas lluvias que afectan al país. |