"Estamos impresionados de saber que los cubanos han
desarrollado productos que tienen que ver con la diabetes, la
reparación de nervios y otros tratamientos que no son comunes que
aparezcan en Estados Unidos", dijo a Prensa Latina en el recinto
ferial de Expocuba Joel Maurer, profesor de la Universidad de
Michigan.
Para este académico el tratamiento del pie diabético
con el medicamento cubano Heberprot-P sería uno de los
procedimientos que salvaría muchas vidas en el país norteño.
Larry Jacobs, quien encabeza una delegación de 21
doctores en Medicina y en Ciencias procedentes de varias ciudades de
Estados Unidos, elogió el sistema de Salud de Cuba y dijo que a
pesar del bloqueo del gobierno de Estados Unidos contra la isla hay
mucha cooperación entre los médicos de ambas naciones.
A manera de paradoja, ejemplificó que "si se tiene
un vecino como Cuba, tan cerca, y se trabaja juntos, el trabajo
sería más eficiente, y no tendría sentido el que no se esté
colaborando más todavía".
Jacobs, quien recibe un tratamiento oftalmológico en
uno de los hospitales de La Habana a causa de la pérdida de su
visión, dijo que la razón por la que vienen acá es ver por si mismos
lo que sucede en Cuba, llevándose la verdadera impresión de la
medicina cubana para luego contarla en su país.
Señaló que los más de 150 programas de salud de la
isla podrían llenar un enorme vacío que existe en todo el mundo.
Algo muy bueno y necesario, acotó.