Los neoyorkinos escogieron a un alcalde calificado como liberal,
Bill de Blasio, que se convierte en el primer demócrata en dos
décadas que dirigirá la gran urbe.
Mientras, el también demócrata Terry McAuliffe —quien contó con
el apoyo del propio presidente Barack Obama durante su campaña—
venció al republicano Ken Cuccinelli y será gobernador de Virginia.
En Nueva Jersey el republicano Chris Christie se aseguró otro
periodo como gobernador.
Son los primeros comicios realizados después del "cierre" parcial
del gobierno, y algunos analistas y medios de prensa los ven como un
medidor de lo que podría suceder en las elecciones de medio término
del año próximo.
El Tea Party, que salió lastimado del pulseo político para la
aprobación del presupuesto, tampoco obtuvo ahora los resultados que
esperaba. En Nueva Jersey, aunque se impuso el candidato
republicano, se trata de un hombre a quien el Tea Party no considera
suficientemente conservador. Christie recibió el apoyo de sectores
poblacionales que generalmente se inclinan hacia el partido opuesto:
56 % del voto femenino y 45 % del voto latino. Eso lo convierte en
una amenaza para los demócratas, y lo ratifica como uno de los
posibles aspirantes a la nominación republicana para las elecciones
generales del 2016.
En una contienda más reñida, McAuliffe obtuvo el 48 % de los
votos en Virginia, frente al 45 % de Cucinelli, favorito del Tea
Party. "Los republicanos deberían aprender la lección", apuntó The
Washington Post, y criticó la postulación de Cucinelli, por ser una
figura muy "polarizada", en un estado "moderado" donde ninguno de
los dos principales partidos tiene la mayoría asegurada.
En Nueva York, aunque se trata de un puesto local, el nuevo
alcalde —que venció con el 73 % de los votos— ha captado la atención
nacional. De Blasio, un blanco casado con una afroamericana, ha
abanderado la lucha contra la práctica conocida como "stop and frisk",
por la que la policía para y cachea a personas sin motivo claro.
Aunque hubo otras definiciones en las elecciones este martes,
estas tres fueron las más publicitadas por lo que simbolizan. "En
una jornada electoral que puede mostrar las perspectivas para (las
legislativas del 2014) y las presidenciales del 2016, los moderados
salieron ganando", resumió el diario Los Angeles Times. (SE)