Al destacar la importancia histórica y el papel del frente
fundado el 4 de octubre de 1958, Luis Antonio Torres Iribar, primer
secretario del Partido en la provincia, aseveró que las columnas
rebeldes pudieron cumplir la estrategia orientada por el Comandante
en Jefe Fidel Castro por el apoyo de los pobladores de las zonas
donde operaban.
Ante el Comandante Delio Gómez Ochoa, jefe fundador del frente, y
otros participantes en los heroicos acontecimientos, Torres Iribar,
integrante del Comité Central del Partido, expresó que las personas
humildes de aquella época, sobre todo las madres, no podían imaginar
que tras la victoria revolucionaria Mir se convertiría en un Consejo
Popular con siete escuelas, un policlínico, una Casa de Abuelos y
varios consultorios del médico de la familia, entre otras
instalaciones sociales.
En cuanto al impacto de la Revolución en la provincia, por solo
mencionar algunos sucesos, destacó la disminución sostenida de la
tasa de mortalidad infantil de 80 por cada mil nacidos vivos antes
de 1959 a 3,63 en estos momentos, en los que igualmente se preparan
en cerca de 1 300 centros educacionales unos 170 mil educandos, en
contraste con las gestiones del régimen abolido por los
revolucionarios, que solo daba acceso al sistema educacional al 9,8
% de los niños en edad escolar.
Concluido el acto, presidido igualmente por el miembro del Comité
Central del Partido y general de división Onelio Aguilera Bermúdez,
jefe del Ejército Oriental, fue develada una tarja en la casa donde
residió durante la infancia y la adolescencia Lidia Doce, destacada
combatiente y mensajera del Ejército Re-belde, caída en el
cumplimiento del deber.
Un momento de mucha emotividad fue la visita de los combatientes
al Museo del Frente, ocasión en la que el comandante Delio Gómez
Ochoa donó varios objetos de valor, entre ellos una bandera nacional
que ondeó en los campamentos rebeldes durante la Guerra de
Liberación.