La aterosclerosis es una enfermedad severa que comienza con el
origen de la vida, progresa de manera silenciosa pero constante, día
a día, hay que pensar en ella desde las edades más tempranas, y se
puede hacer mucho para evitar y combatir sus daños, indicó a
Granma el Doctor en Ciencias José Emilio Fernández-Britto,
director del Centro de Investigaciones y Referencias de
Aterosclerosis de La Habana.
Reconoció que es una enfermedad "muy compleja", de origen
metabólico, que se caracteriza porque la sangre se intoxica de
productos dañinos, y afecta las paredes de las arterias que llevan
el flujo sanguíneo a los órganos. Estos productos dañinos, dijo,
unos vienen de fuera como el humo del tabaco y otros se fabrican por
el propio organismo.
La aterosclerosis es la primera causa de muerte e ingresos
hospitalarios, invalidez, discapacidad y de pérdida de la calidad de
vida en todos aquellos países donde las infecciones no ocupan estos
lugares, como es el caso de Cuba, afirmó el científico.
Citó entre los principales factores que contribuyen a su
aparición y desarrollo los genéticos, como la herencia de padres que
trasmiten su enfermedad; biológicos, aumento de la presión arterial,
exceso de azúcar en la sangre, fumadores activos y pasivos,
trastornos de las grasas, mala nutrición en exceso y en defecto,
sedentarismo y alcoholismo.
También los sociales: vivienda, educación, centro de trabajo,
familiares, vecinos y otros, y culturales, el modo y el estilo de
vida de cada persona, de su familia, del ambiente donde vive y donde
trabaja y las costumbres de su propia educación.
Entre los signos y síntomas de alerta de esta enfermedad destacó
el sobrepeso y la obesidad, tener síntomas asociados a la
hipertensión arterial, como dolor de cabeza, ver estrellitas al
mover la cabeza, decaimiento, aumento considerable de los deseos de
orinar y tener mucha sed constantemente.
Y subrayó: "Si los exámenes de sangre señalan alteraciones de los
lípidos (colesterol), si somos fu-madores o permitimos que fumen a
nuestro alrededor, una visita anual al médico de familia
garantizaría encontrar señales importantes de aterosclerosis que
pueden y deben ser tratadas de inmediato".
El profesor Fernández-Britto valoró la muerte súbita como "un
episodio sorprendente e inesperado", que tiene varios orígenes pero
sin duda las lesiones de las arterias que llevan la sangre al
corazón y al cerebro, producto del metabolismo intoxicado
(aterosclerosis), es su causa más frecuente, y el padecer de varios
factores de riesgo de aterosclerosis a la vez contribuye a la muerte
súbita cardiaca y cerebral.
Vísperas del Primer Simposio Cubano de Muerte Súbita
Cardiovascular, que se celebrará del 7 al 9 de noviembre próximo en
el Palacio de las Convenciones, el experto planteó que, en el tema
que nos ocupa, es posible hablar de prevención con medidas bien
sencillas y al alcance de todos: no fumar ni permitir que se fume a
nuestro lado; hacer por lo menos 30 minutos de ejercicios diarios,
sobre todo caminar de manera continuada y aumentando la distancia en
ese tiempo.
Asimismo comer bajo de sal y con poca azúcar y, también,
vegetales y frutas dentro de las posibilidades de cada hogar; evitar
lo más posible las grasas saturadas en las comidas y nunca refreír
la grasa ya cocinada. Y muy importante: tener el control del peso
corporal y de la tensión arterial y, de acuerdo con la edad, acudir
al médico de familia ante cualquier síntoma.