El rotativo, que muestra parte de un documento clasificado
filtrado por el exagente de la CIA, Edward Snowden, indicó que la
Agencia obtuvo los teléfonos de 200 responsables políticos y
militares a través de funcionarios del gobierno norteamericano,
entre los que figuran la Casa Blanca y los Departamentos de Estado y
Defensa.
El memorándum confidencial con fecha del 2006 no detalla la
identidad de esos líderes. Igualmente, indica que la NSA anima a
funcionarios a compartir sus contactos para poder añadir los números
de teléfono de políticos extranjeros a sus sistemas de vigilancia.
La canciller alemana, Ángela Merkel, una de las mandatarias que
se ha visto afectada por los sistemas de escuchas norteamericanos,
calificó de inaceptable el hecho de espiar a aliados, y afirmó que
ya le había transmitido su opinión sobre el asunto al presidente
Barack Obama.
Desde el otro lado del Atlántico, la presidenta brasileña, Dilma
Rousseff, condenó nuevamente el espionaje electrónico de EE.UU. al
que fue sometido su país y se pronunció por la creación de un marco
regulador internacional para la protección de los datos a través de
Internet, reporta PL.