Aunque tres días resulta un tiempo demasiado escaso cuando se
tiene mucho que decir, para los que contemplaron el segundo Coloquio
Internacional Latinos en las Artes y las Letras, que concluyó ayer
en la Casa de las Américas, fueron muy bien aprovechados a juzgar
por el cúmulo de actividades contempladas en la agenda del evento,
llevadas a cabo con beneplácito por sus más de 30 participantes.

La huella cultural que se produce por parte de los latinos hacia
el interior de los Estados Unidos y que se ha convertido en un
referente fuera de sus fronteras fue el blanco al que apuntó desde
la inauguración del evento Antonio Aja, director del Programa de
Estudios sobre Latinos en los Estados Unidos del centro anfitrión, y
un hecho que explicitaron, entre otras acciones, los paneles,
lecturas de poesía, presentaciones de libros y revistas,
exposiciones fotográficas y homenajes como el que tuvo lugar para
significar la personalidad de la intelectual Lourdes Casal.
Reveladora resultó la exposición en torno a las editoriales
independientes cuya factura responde a los desvelos de muchos
latinos dentro de los Estados Unidos, tal como las editoriales
Campana y Arte Poética Press, cuyos objetivos —además de la obvia
publicación de las obras de estas comunidades— están, además, en
desmitificar "que estos emigrantes en ese país no leen ni compran
libros", lo cual ha quedado desmentido al "agotarse todos los
ejemplares en los eventos que han celebrado", explicaba la escritora
cubana Sonia Rivera Valdés, aludiendo concretamente a las casas
editoras Campana y Campanita, de la organización cultural Latino
Artists Round Table, que ella preside.
La lectura de poemas y fragmentos narrativos protagonizados por
Esmeralda Santiago, Aileen El-Kadi, Juana Ramos, Cristian Gómez,
Margarita Drago y Sonia Rivera resultaron enjundiosas muestras de la
calidad de las artes y las letras latinas en el Norte y fungieron
como un sentido intercambio entre los autores y sus creaciones.
El teatro recibió también su mirada desde el Sur —tal y como se
concibió la cita al solicitar las visiones de estos intelectuales
desde sus culturas de origen— en un panel moderado por Vivian
Martínez Tabares, directora del Departamento de Teatro de la Casa,
así como fueron abundadas en amplio debate las interrogantes ¿de
dónde venimos? y ¿hacia dónde vamos?, a propósito de las
interacciones culturales.
Un concierto con el cantautor Descemer Bueno cerró con broche de
oro la tercera y última jornada que cobijó a los latinos por estos
días en su propia Casa.