José
Sierra, director comercial de la Marina Marlin en la meridional
ciudad de Cienfuegos, 250 kilómetros al sudeste de La Habana,
declaró a la prensa que la especialidad acuática ubicará en la
llamada Perla del Sur cubano su primer centro de operaciones.
Desde, dijo, se atenderán 12 circuitos localizados en la región
central de la Isla.
Este deporte puede practicarse lo mismo en escenarios marítimos
que fluviales y lacustres y en consecuencia la oferta cubana incluye
entre otros el lago artificial de Hanabanilla.
Embalse cercado por montañas del grupo orográfico Guamuhaya y la
represa Zaza, la mayor del país, ubicados en las vecinas provincias
de Villa Clara y Sancti Spíritus, respectivamente.
Para ello dispondrán de 16 unidades del tipo doble, en las cuales
los piraguistas aficionados podrán recorrer distancias cercanas a
los 40 kilómetros (20 millas náuticas).
Las embarcaciones para aguas tranquilas suelen ser de gran
eslora, hasta ocho metros en caso de las destinadas a una pareja de
practicantes, y resultan menos maniobrables que las empleadas en
cursos fluviales.
En Cienfuegos, la Marina Marlin prestó servicios a más de 30 mil
turistas en los ocho primeros meses del actual año, precisó Sierra.