Los resultados y recomendaciones fueron informados por el Señor
Dimitri Vlassis, director de la Subdivisión de Lucha contra la
Corrupción y los Delitos Económicos, de la División de Tratados de
la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
"Hemos recibido con mucho gusto e interés las observaciones
hechas, y también hemos escuchado nuestros logros, no desde una
posición de autocomplacencia, sino pensando en cómo podemos avanzar
más", refirió ayer en conferencia de prensa la vicepresidenta del
Consejo de Estado y contralora general de la República, Gladys
Bejerano.
Por su parte, el Señor Vlassis señaló que el liderazgo de Cuba ha
sido decisivo en el desarrollo de este mecanismo de revisión y de la
Convención en sentido general, lo que demostró una vez más con su
participación en el examen y constituyó una fuente de aprendizaje
para el personal de la Secretaría de la UNODC.
Añadió que el mecanismo de revisión, aún experimental, está
funcionando de la mejor forma posible gracias a los principios en
que se basa, entre ellos: el trato respetuoso a los países, hacia su
soberanía, diversidad, sistema legal... , y la no intrusión.
"El propósito es que esta sea una herramienta que nos ayude a
unir fuerzas para identificar pasos sustanciales en la lucha contra
la corrupción", enfatizó.
En ese sentido, la Contralora General destacó la importancia de
este tipo de examen para la lucha de nuestro país contra la
corrupción y cualquier manifestación de ilegalidad o indisciplina,
sobre todo en medio de la actualización del modelo económico cubano,
que conlleva la revisión de varias normas jurídicas. Destacó además
el alto nivel profesional de los especialistas visitantes y la
aceptación de Cuba desde un primer momento a su elección para el
estudio, lo cual se hace por sorteo.
Los capítulos III y IV —relativos a la Penalización y Aplicación
de la Ley y a la Cooperación Internacional— fueron revisados en Cuba
con la asistencia de Guatemala y Brasil, como examinadores.