LA
HABANA. — El judoca cubano Asley González denunció aquí a través del
semanario deportivo Jit el intento de soborno que le ofrecieron para
perder la final de los 90 kilogramos del Mundial recién finalizado
en Brasil.
Me ofrecieron 15 mil y luego 20 mil dólares por perder, pero mi
sueño de ser campeón mundial y mis principios no me hicieron vacilar
nunca. Además, no podía fallarle a mi entrenador Justo Noda, a mi
pueblo y a la Revolución que siempre nos han inculcado el honor y la
dignidad ante todo, resaltó González al rotativo.
González, subtitular olímpico de Londres-2012, fue la sensación
de nuevo en esa división tras doblegar primero al griego Ilias
Iliadis, campeón olímpico y doble titular mundial, y en la discusión
del oro al georgiano Varlam Liparteliani.
El griego ha sido el mejor por muchos años, incluso me ganó en el
World Masters de Tyumen en Rusia en mayo, pero nadie podía impedir
la meta que me propuse. Después ya sabía que el oro era mío porque
al georgiano le gané en los Grand Slam de París y Miami, eso motivó
la propuesta antideportiva, aseveró González.
Sin embargo, el judoca considera que la victoria por wasri sobre
el húngaro Krisztian Toth le resultó difícil de conseguir.
Sí, estuve a 13 segundos de perder mi sueño. Se me hizo difícil
porque no lo conocía, para la próxima debo tener otra estrategia
para no dejar que él domine el combate.
De acuerdo con el semanario deportivo, el joven deportista
comenzó los trajines sobre el tamtami a los 11 años con el
entrenador Pedro Pérez, a quien calificó de "un gran profesor y
amigo".
Comenzamos en Placetas pero tuvimos que parar por el deterioro de
la instalación. Luego se construyó una nueva y se trajeron colchones
y de allí a la provincial con un primer año en que no participé en
los Juegos Escolares Nacionales, pero en los siguientes gané dos
oros y una plata que me llevaron a la ESPA nacional en el 2005.
En cuanto a los adelantos y progresos en el judo internacional,
González confesó que ese judo dinámico y técnico le favorece
incluso, con el arbitraje.
Me favorece porque soy menos de fuerza y por eso me adapto más
fácil, además frente a los contrarios me gusta atacar para buscar o
mantener ventaja, hasta cuando estoy debajo. Por eso no me imponen
muchos Shido (penalización) y a mis rivales sí. Lo importante es
dominar el combate, enfatizó.
Para el bronceado en el certamen universal de Francia-2011 el
sacrificio, el esfuerzo diario y el cumplimiento a cabalidad de las
estrategias de sus entrenadores le ayudan a mejorar poco a poco en
aras de alcanzar el anhelado sueño de conquistar la gloria olímpica
en Río de Janeiro-2016.
En Río estaré listo para completar mis sueños. Para ello
trabajaré, para ser cada día mejor y pulir cada detalle con vistas a
ser un judoca más completo. Por mí y por Cuba, que quisiera llegara
a ser una gran potencia, destacó González, quien tiene también la
aspiración de licenciarse en Cultura Física.