NACIONES UNIDAS.— Promover los derechos de todos los jóvenes
migrantes y aprovechar al máximo su potencial de desarrollo fueron
trazados el domingo como objetivos de las Naciones Unidas en ocasión
del Día Internacional de la Juventud (12 de agosto).
En un mensaje por la efeméride, el secretario general de la ONU,
Ban Ki-moon, destacó la contribución que realiza ese sector juvenil
a las sociedades de origen, tránsito y destino, "tanto
económicamente como enriqueciendo su tejido social y cultural".
Advirtió que los jóvenes migrantes enfrentan amenazas, racismo,
xenofobia, discriminación y violaciones de sus derechos y en el caso
de las féminas están expuestas a la explotación y el abuso sexuales.
Ese grupo constituye más del 10 % de los 214 millones de
migrantes internacionales registrados anualmente, según datos de la
ONU.
Ban Ki-moon identificó a la pobreza, las malas condiciones de
vida y la dificultad para encontrar un empleo digno como
denominadores comunes de la experiencia de los migrantes, problemas
exacerbados por la actual crisis económica y financiera.
El máximo responsable del organismo mundial confirmó la
celebración en octubre próximo del llamado segundo diálogo de alto
nivel sobre la migración internacional y el desarrollo.
El Día Internacional de la Juventud fue instaurado por la
Asamblea General de la ONU en diciembre de 1999, a propuesta de la
Conferencia Mundial de Ministros de la Juventud efectuada en Lisboa
un año antes.