SAN
SALVADOR.— El cardenal cubano Jaime Ortega presidió este domingo la
misa de cierre del V Congreso Eucarístico Nacional de El Salvador,
al cual fue designado enviado especial por el papa Francisco.
Ortega, arzobispo de La Habana, participó también en los festejos
por el centenario de la creación de la arquidiócesis de la capital
salvadoreña por el papa Pío X en 1913.
A la ceremonia de este domingo acudió el vicepresidente Salvador
Sánchez Cerén, candidato presidencial del Frente Farabundo Martí
para la Liberación Nacional (FMLN), con quien intercambió brevemente
el religioso cubano.
Entre otras personalidades asistieron Ã"scar Ortiz, alcalde de
Santa Tecla, ciudad contigua a la capital por el oeste, y compañero
de fórmula de Sánchez Cerén.
Asimismo, el presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido
Reyes, del FMLN; el embajador de Cuba aquí, Pedro Pablo Prada; el
nuncio apostólico León Kalenga; y el arzobispo de Tegucigalpa,
Honduras, cardenal Oscar Rodríguez.
Durante su homilía, el cardenal Ortega se pronunció por la
canonización del obispo mártir Oscar Arnulfo Romero, asesinado por
los escuadrones de la muerte el 24 de marzo de 1980.
Pedimos al Señor para él (Romero) el honor de los altares, dijo
el Arzobispo de La Habana durante la homilía del acto celebrado en
el complejo deportivo El Cafetalón, en Santa Tecla.
Ortega recordó que la última cena de Jesucristo con sus
discípulos estuvo rodeada de un "ambiente de dolor y sospechas".
El ambiente de esta cena cargada de tensión nos hace pensar en la
última eucaristía que monseñor Romero no pudo concluir; ahora, en
esta celebración, lo sentimos a él cercano a nosotros y pedimos al
Señor para él el honor de los altares, expresó.
Que aquella eucaristía que no pudo concluir monseñor Romero
traigan a este querido país, que lleva el nombre del mismo Salvador
del Mundo, un gran deseo de reconciliación, un rechazo total de la
violencia y una siembra de paz en los corazones y en la sociedad,
agregó.
El cardenal Ortega llegó a San Salvador el pasado viernes y ayer
recorrió junto a las autoridades religiosas salvadoreñas varios
sitios vinculados a la vida de monseñor Romero. El religioso
retornará mañana a La Habana.