WASHINGTON.
— Una nueva ley sobre préstamos a universitarios quedó hoy lista en
Estados Unidos para la firma del presidente Barack Obama, pese a
críticas en su contra por las perspectivas de futuros repuntes en
las tasas.
Con 392 votos a favor y solo 31 negativos, el proyecto de
legislación venció este miércoles su etapa en la Cámara de
Representantes y fue enviado a la Casa Blanca para consideración del
mandatario demócrata.
Los legisladores decidieron colocar los topes de los intereses
financieros en 3,86 por ciento, por debajo de la marca de 6,8
validada el 1 de julio último. Sin embargo, la enmienda que ya pasó
el Senado la semana anterior, dejó resquicios legales para que las
tasas puedan ser incrementadas en años próximos, según dispuso la
bancada republicana, mayoritaria en la cámara baja.
Parlamentarios del partido opositor ataron la maniobralidad en
los tipos de interés a la capacidad de autofinanciamiento del
gobierno federal, después de oficializar un límite máximo porcentual
de 8,25 por ciento para el siguiente lustro.
Desde julio pasado millones de universitarios en Estados Unidos
tuvieron que pagar un monto adicional de tres mil dólares anuales
para cancelar préstamos financieros que cubren sus carreras
superiores.
Luego que el Congreso falló en hallar una solución legislativa a
finales de junio, la tasa de cobro de los subsidios saltó desde 3,4
hasta 6,8 por ciento, lo que se tradujo además en una duplicación de
las deudas del alumnado.
Según el Centro de Estadísticas de la Educación, alrededor del 65
por ciento de los jóvenes norteamericanos que dejan las carreras en
los primeros tres años, no obtendrán diplomas pero si saldrán de las
instituciones con un débito cercano a 20 mil dólares.
La agencia Fidelity Investments recordó que las matrículas en
universidades privadas de este país cuestan entre 40 mil y 60 mil
dólares anuales, algunos alumnos se gradúan con deudas superiores a
100 mil dólares, y se demoran una década en pagarla.
Para el curso de 2013 se pronostica que cerca del 70 por ciento
de los graduados universitarios en Estados Unidos deje las aulas con
una deuda per cápita promedio de 35 mil 200 dólares.
Varios medios de prensa denominan al débito estudiantil nacional
"la tormenta perfecta" después de conocerse que el monto superó a
inicios de junio el millón de millones de dólares
.