Una
corte criminal de Libia dictó hoy la pena de muerte contra Ahmed
Ibrahim, antiguo ministro del depuesto líder Muammar Gadafi, a quien
declaró culpable de asesinato, secuestro e incitación a la violencia
durante el levantamiento popular en 2011.
Los jueces del tribunal de Misrata, noroeste de Libia,
encontraron a Ibrahim, exministro de Educación, culpable de reunir a
residentes de Sirte, ciudad natal de Gadafi, para formar grupos
armados y combatir a los rebeldes que buscaban derrocar al régimen.
También lo declararon culpable de asesinar a un hombre llamado
Moftan Sadiq el-Sofrani después de secuestrarlo de un hospital, así
como de dar órdenes para raptar y matar a cinco miembros de su
familia.
La difusión de noticias falsas a través de la radio emisora
local, así como atemorizar y desmoralizar a la población fueron
otros cargos imputados al antiguo funcionario, quien será ejecutado
por un pelotón de fusilamiento como lo establece la legislación
libia.
Ibrahim, cuya fecha de ejecución no fue precisada, ocupó altos
cargos durante el régimen de Gadafi, incluido el Ministerio de
Educación, y fue detenido por los rebeldes en Sirte, donde el ex
hombre fuerte de Libia también fue capturado y muerto en octubre de
2011.
Hace unos días, el mismo tribunal de Misrata condenó a muerte a
Masnour Al-Daw Gadafi, quien es miembro de la familia del exlíder
libio y se desempeñó como jefe de seguridad de la entonces temida
Guardia Popular, por su papel en la revuelta de ese año.
Las autoridades libias están dispuestos a "castigar" a los
miembros de la familia Gadafi y a quienes colaboraron con el régimen
de 42 años, pero activistas de los derechos humanos han expresado su
preocupación sobre los procedimientos judiciales libios.
La figura más alta del antiguo régimen que aún debe enfrentar
juicio es Saif al-Islam, hijo de Gadafi, cuyo juicio se espera para
el mes de agosto.