El
Papa Francisco hizo este sábado un llamado al diálogo para el
respeto mutuo y la construcción de la reconciliación dentro del
catolicismo. "Hoy se apuesta por el diálogo o todos perdemos",
expresó el sumo pontífice.
En una reunión con políticos, diplomáticos, líderes comunitarios,
intelectuales, empresarios, artistas y líderes de las principales
comunidades religiosas de Brasil, Francisco señaló que considera
"fundamental para afrontar el presente el diálogo constructivo",
agregó que entre la indiferencia egoísta y la protesta siempre hay
una opción posible, el diálogo".
El sumo pontífice señaló que cuando los líderes "de los
diferentes sectores" le piden consejos, su respuesta siempre es la
misma, "diálogo, diálogo, diálogo", en este sentido, "enfatizó que
el mundo no es posible sin conversaciones constructivas, y que la
única manera que los pueblos avancen es con la cultura del
encuentro, "una cultura en la que todo el mundo tiene algo bueno que
aportar y todos pueden recibir algo bueno en cambio", insistió.
Exaltó el valor de la originalidad dinámica que caracteriza la
cultura brasileña con su extraordinaria capacidad para integrar
elementos diversos "el común sentir de un pueblo, las bases de su
pensamiento y su creatividad, los principios básicos de su vida, los
criterios de juicio sobre las prioridades, las normas de actuación
se fundan, se fusionan y crecen en una visión integral de la persona
humana".
Mencionó además que el futuro exige la tarea de rehabilitar la
política, "que es una de las formas más altas de la caridad", y
sostuvo que el "futuro nos exige una visión humanista de la
economía" y una política "que logre cada vez más y mejor la
participación de las personas, evite el elitismo, y erradique la
pobreza, que a nadie le falte lo necesario y que se asegure a todos
dignidad, fraternidad y solidaridad", enfatizó que este es el camino
correcto.
Francisco indicó que esas son sus palabras de "preocupación como
pastor de iglesia, y de respeto y afecto que tengo por el pueblo
brasileño". Cerró la misa bendiciendo a los presentes y "de corazón"
pidió a Dios que los bendijera.
El Papa inició el lunes su visita oficial a Brasil, la primera al
continente latinoamericano desde que fue elegido papa de la Iglesia
católica.
En su periplo, el sumo pontífice ha estado en varios lugares de
Río y de Sao Paulo predicando bendiciones; aunque su viaje ha
generado diversas protestas en contra del gasto público que generó
la visita para el país suramericano.