RÍO
DE JANEIRO.— La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) católica
arrancó este martes de manera oficial con una misa en la playa
Copacabana de esta urbe, que reunió a cerca de 500 mil fieles de
todos los continentes.
La ceremonia religiosa fue presidida por el arzobispo de Río de
Janeiro, Orani Tempesta, quien estuvo acompañado del cardenal
Stanislaw Rylko, responsable de la JMJ en el Vaticano. Un peregrino
leyó un mensaje enviado por el papa Francisco, quien se mantuvo esta
jornada sin salir de la residencia Sumaré, informa PL.
La actividad se realizó en un gigantesco escenario de casi cuatro
mil metros cuadrados, instalado sobre la arena de esta turística
playa, donde fueron montadas, además, pantallas gigantes para la
proyección de imágenes y videos.
Para este miércoles está previsto que el Sumo Pontífice se
traslade al Santuario de Aparecida, en el vecino estado de Sao
Paulo, donde oficiará una misa para unas seis mil personas y después
almorzará con sacerdotes y misioneros de esa localidad.